Valenciano: “Ahora sí hay que demostrar que el PSOE ha vuelto, con hechos y con votos”
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La vicesecretaria general del PSOE y cabeza de lista en las elecciones al Parlamento Europeo, Elena Valenciano, aseguró este sábado que estos comicios pueden ser “el punto de inflexión” en la política española. “Ahora sí hay que demostrar que el PSOE ha vuelto, con hechos y con votos”, sentenció.
Lo dijo en su intervención ante el Comité Federal del PSOE, su máximo órgano de dirección entre congresos, justo después de la ratificación por un 98% de los votos de la candidatura que encabeza la propia Valenciano secundada por Ramón Jáuregui, al que agradeció expresamente su actitud “siempre generosa con el partido” y su disposición a “compartir conmigo el liderazgo en esta aventura”.
Desgranó sus principales compromisos para recuperar la Europa “con rostro humano” y alertó al final de su intervención de que los progresistas “no podemos permitir” que una victoria del PP en estas elecciones convierta la segunda parte de la legislatura en un “calvario aún mayor que la primera”.
La victoria del PSOE en las elecciones europeas, añadió, será el anticipo de las municipales y autonómicas, y después de las generales. Serán “el punto de inflexión” en la política española, “el principio del fin de la hegemonía de la derecha”.
Fue justo después cuando recuperó la idea que lanzó el secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, en la Conferencia Política del pasado mes de noviembre. “El PSOE ha vuelto”, dijo aquel día. “Ahora sí hay que demostrar que el PSOE ha vuelto, con hechos y con votos”, afirmó Valenciano.
Aseguró que es “mucho lo que está en juego” y “muy grande la responsabilidad que asumimos”, y aunque desde el primero al último de la lista se van a dejar la piel, “no será suficiente”. “Necesitamos que aparezca el PSOE de las grandes ocasiones”, alertó.
Europa, explicó, ha tenido “rostro humano” durante los últimos setenta años, pero mucha gente piensa que lo está perdiendo, sobre todo los 27 millones de ciudadanos que no tienen empleo, los trabajadores a los que quitan derechos por los que han luchado durante décadas, o los 125 millones de europeos que viven por debajo del umbral de la pobreza.
Por ello, señaló como objetivo “reconstruir esa Europa con rostro humano” y que sea “más unida, más libre, más justa y más plural” de lo que ha sido en los últimos años, gracias a la mayoría progresista que puede haber tras las elecciones.
Denunció que el problema no es Europa sino cómo se ha gobernado, protegiendo más al capital que al trabajo, y viendo el estado del bienestar como una “rémora para el crecimiento”.
Señaló en ese sentido al candidato conservador como “uno de los más destacados hombres de negro” de Europa, de quienes han encabezado esa política, al que reclamó que integre una candidatura para ser refrendado por las urnas, como el socialista, Martin Schulz.
Acusó a los conservadores europeos de no haber vencido la crisis y de haber abierto “nuevas fracturas”, entre el norte y el sur, entre los mercados y la sociedad, entre los europeos y los inmigrantes, de haber quebrado con ello la confianza de muchos en la democracia y de haber quebrado el propio ideal europeísta, “que pasa por sus peores momentos”.
Han dejado una Europa “empobrecida, rota, y socialmente injusta” que vuelve a ser recorrida por “viejos y conocidos fantasmas” y con ello muchos ciudadanos han sabido “por las malas” que desde Bruselas puede cambiar su vida.
Son los socialdemócratas los que pueden “dar vida a ese nuevo europeísmo”, sentenció, porque la derecha “no puede, no sabe y no quiere hacerlo”.
Es hora por ello de que la izquierda se ponga “al timón”, pero la izquierda “que puede, que sabe, que ofrece soluciones de verdad”, y esa es la que representa el Partido Socialista Europeo, “la única alternativa real que existe en este momento” para que haya realmente un gobierno europeo y no “una amalgama de gobiernos” y para que mande el Parlamento y no la Troika.
Ese rostro humano se recupera con el empleo, con la defensa de la competitividad mediante la calidad y la excelencia y no por salarios bajos, aseguró, y también defendiendo los derechos de las mujeres que se “indignan”, dijo, cuando un gobierno como el de España “quiere arrebatarles su condición de seres autónomos y libres”.
Valenciano aseguró que defenderá tres directivas concretas en Europa, para garantizar la igualdad salarial incluyendo sanciones para quienes mantengan la discriminación, para equiparar salarios mínimos, y para definir una política común contra el fraude y para “erradicar” los paraísos fiscales.
El fraude fiscal, aseguró, suma un billón de euros en Europa, una cifra “de escándalo” que sería suficiente para financiar todo el sistema sanitario de la Unión Europea.
(SERVIMEDIA)
15 Mar 2014
CLC/man