Las intoxicaciones, suceso en el que al menos dos personas manifiestan la misma enfermedad, fueron 28, con 1.465 personas expuestas a ellas, 372 afectadas y un total de 13 hospitalizadas. Las intoxicaciones se produjeron en su mayoría en restaurantes.

Además, se notificaron al ayuntamiento 576 alertas alimentarias, debidas a la presencia de algún alimento o bebida con riesgo para la salud, de las que 225 eran de origen animal, 198 vegetal y 153 de otro tipo. El ayuntamiento realizó un total de 47 controles para localizar los productos con un resultado de siete inmovilizaciones.

El Organismo Autónomo Madrid Salud dirige las actuaciones para garantizar la calidad y seguridad alimentaria, adoptar medidas urgentes en los casos de emergencias, supervisar y dirigir las inspecciones sanitarias de las Juntas de Distrito y llevar la inspección sanitaria en Mercamadrid, uno de los mayores mercados del mundo.

Torrecilla recalcó que, durante los primeros seis meses, el ayuntamiento ha destruido 36.000 kilos de alimentos procedentes de Mercamadrid y ha inmovilizado otros 4.363.

Para el año 2006, el ayuntamiento tiene previsto realizar 14.002 inspecciones y durante el primer semestre ya ha ejecutado más de diez mil.

Las deficiencias más frecuentes en los locales que manipulan alimentos son los lavamanos de cocina en malas condiciones, la inadecuada construcción del cuarto de basura, la falta de indicadores de temperatura en equipos de frío y los insuficientes dispositivos de lucha antivectorial.

COMERCIO MINORISTA

En referencia al comercio minorista, el ayuntamiento ha realizado más del 80% de las inspecciones previstas, con un resultado de que el 84% de las aguas de consumo y productos alimentarios analizados han sido muestras conformes.

El director general recalcó que, gracias a una máquina, comprada el año pasado, que permite reconocer el ADN de los alimentos, se está conociendo si realmente el producto ofrecido es el original. De 42 muestras analizadas con esta máquina, 15 resultaron fraudulentas, siendo el caso más frecuente el cambio del mero por perca del Nilo o cherna.

En cuanto a la restauración colectiva, los controles se dividen en tres zonas, comedores escolares, centro de mayores y restauración en general. Hay que señalar que en el 2005, el ayuntamiento no ejecutó el total de las inspecciones programadas en los comedores escolares.

Por otro lado, el ayuntamiento también realizó controles a la bebida alcohólica, con un total de 112 muestras de ron, ginebras y güisquis, y sólo en un caso se detectó "garrafón".