Fernández Díaz se refirió a este asunto en Madrid, al presidir la ceremonia de jura de la XV promoción de comisarios principales de la Policía Nacional. A este acto también asistieron el director general de este cuerpo, Ignacio Cosidó, y la delegada del Gobierno en Madrid, Cristina Cifuentes.

Durante esta intervención, el ministro se refirió a la presión migratoria sobre Ceuta y Melilla y a la polémica generada desde que el pasado 6 de febrero una quincena de inmigrantes murieran en la playa ceutí del Tarajal cuando intentaban entrar a nado en territorio español.

A este respecto, el ministro destacó el trabajo que guardias civiles y policías realizan “en circunstancia tan difíciles” para custodiar el perímetro fronterizo de Ceuta y Melilla. “Saben que tienen al ministro del Interior y al Gobierno de España no detrás de ellos, sino junto a ellos”, afirmó al respecto. Fernández Díaz añadió que en el Ejecutivo saben “perfectamente” el trabajo que están desarrollando estos agentes y cómo “en todo momento cumplen con su misión en el marco de la ley”.

LA LEY “ACTÚA”

No obstante, apuntó que “como somos un Estado de derecho, tenemos garantía de que si en algún momento se da alguna circunstancia que se aparta de ese modo de comportamiento, el Estado de derecho actúa”, en referencia a la eventualidad de que se produzca alguna irregularidad a la hora de evitar la entrada de subsaharianos en Ceuta y Melilla.

Sin embargo, el ministro dijo que “no se puede poner en cuestión a instituciones como la Policía Nacional o la Guardia Civil, que tienen como norma de conducta velar por la seguridad y libertad de los ciudadanos y cumplir y hacer cumplir la ley en todo momento”

Además, el ministro dijo que la presión migratoria sobre las ciudades españolas del norte de África debe abordarse “a nivel europeo”. Aseguró que toda la Unión Europea (UE) debe actuar “bajo el principio de solidaridad y responsabilidad compartida” en esta cuestión, que incluye ayudar a los países de origen de los inmigrantes irregulares.

Al mismo tiempo, señaló que se debe “ayudar a los países como España que, por ser frontera exterior de la UE estamos, haciendo un esfuerzo especialísimo, que no podemos hacer en solitario para combatir ese tráfico criminal”, en referencia a la llegada masiva de subsaharianos a Ceuta y Melilla.