El pasado 8 de noviembre, 'Haiyan' dejó un impacto desolador en la región filipina de las Bisayas, que afectó a 16.078.181 personas y provocó la muerte de 6.183 y heridas a otras 28.626, según el último boletín difundido por el Consejo Nacional para la Reducción y Gestión de Desastres de Filipinas, al que tuvo acceso Servimedia.

La FICR señaló que gran parte del trabajo del Movimiento Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja en estos meses se centró en la satisfacción de las necesidades de emergencia de las personas supervivientes a la catástrofe, con paquetes de alimentos y comidas preparadas.

La federación recalcó que, a pesar de las condiciones insalubres de vida que sufren miles de familias sin hogar, uno de los éxitos del trabajo de la Cruz Roja está en que, hasta el momento, no ha habido ninguna emergencia importante de salud pública.

De hecho, Cruz Roja ha ayudado a prevenir brotes de enfermedades al proporcionar servicios médicos de emergencia a través de las Unidades Básicas de Salud y con la producción y distribución de más de 3,4 millones de litros de agua potable a más de 1,1 millones de personas en las ciudades de Tacloban, Tolosa y Dulag, en la isla de Leyte.

“El mantenimiento de una buena salud y prevenir las enfermedades son componentes esenciales del programa de salud de Cruz Roja y más de 138 voluntarios de la Cruz Roja de Filipinas han sido entrenados para trabajar con las comunidades locales. Más de 7.000 personas han recibido mensajes de promoción de la higiene”, añadió.

ALOJAMIENTO

Por otro lado, la FICR recalcó que una de las necesidades más urgentes para los supervivientes es el refugio. Con más de un millón de viviendas dañadas o destruidas, cerca de 100.000 personas permanecen en centros de evacuación, mientras que casi 4 millones residen en casas de acogida, con familiares o han buscado alojamiento temporal alternativo, aunque muchas familias permanecen acampadas sobre los restos de sus viviendas dañadas.

Los organismos que trabajan en el área de alojamiento, que la FICR lidera internacionalmente, han proporcionado más de 324.000 hogares con materiales de refugio de emergencia, como lonas, tiendas de campaña, herramientas y cuerdas.

“La atención se centra ahora en el apoyo a las familias para volver a reconstruir sus hogares a un nivel más seguro y más alto. Cerca de 30.000 hogares han sido provistos de material para techos, cajas de herramientas, dinero en efectivo y asistencia técnica”, apostilló.

La Cruz Roja apuntó que la distribución de alimentos se irá eliminando paulatinamente y el reparto de donaciones económicas en efectivo se ampliarán, para que las comunidades afectadas recuperen sus medios de vida.

En los próximos días, la Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja lanzará una revisión de su llamamiento de emergencia, con el fin de apoyar la recuperación de unas 100.000 familias (alrededor de 500.000 personas) para los próximos 24 meses.