Lo dijo la vicesecretaria general del PSOE, Elena Valenciano, después de la reunión del Consejo de Política Europea, en rueda de prensa junto a la presidenta de la organización de mujeres del Partido de los Socialistas Europeos, Zita Gurmai.

Los socialistas han convocado para el próximo 29 de marzo la cumbre europea en defensa de la libertad de las mujeres y en contra de la reforma del aborto impulsada por el Gobierno, en la que quieren implicar a ciudadanos, expertos, y a todos los partidos socialdemócratas europeos.

Valenciano insistió en que para el PSOE no hay “nada más importante en los próximos meses” que ganar las elecciones al Parlamento Europeo, para defender un modelo de sociedad europea “que está en riesgo” por las políticas conservadoras.

Creen que Europa es el “campo de batalla” de un conflicto “ideológico” entre quienes pretenden “fortalecer los derechos sociales” y quienes quieren “seguir recortándolos para hacer negocio” o para, como en el caso del aborto, “imponer su modelo de vivir” a todos los ciudadanos.

Por ello, quieren que esas elecciones sean “el primer no a la crueldad, a la mentira y a la desfachatez” que está demostrando el PP y a la “pesadilla” que su gestión está suponiendo para muchos ciudadanos.

Gurmai comprometió el respaldo de los socialdemócratas europeos frente al “gran horror” que supone para las mujeres la reforma del aborto, en un momento en el que ya las confesiones religiosas tienen que “dejar de ejercer presión” sobre la política.

Para Valenciano, es “normal” que dentro del PP se escuchen voces discrepantes con ese proyecto, con el que sería “prácticamente imposible abortar en España”, y defiende por ello un debate “libre” entre los parlamentarios y también un “voto libre” sobre el texto, no sometido a disciplina de partido.

Después de que la diputada del PP Celia Villalobos reclamara libertad de voto, Valenciano juzgó “normal” que haya en ese partido dirigentes “muy molestos” con la iniciativa.

Subrayó que los socialistas “no queremos poner a nadie contra las cuerdas de nada”, pero reclaman el voto secreto porque si hay quien no está de acuerdo su única forma de mostrarlo a los ciudadanos es rechazarlo con su voto.

Al pedir voto en conciencia en el PP, insistió, los socialistas no pretenden extraer ventaja política de ese debate, sino pedir “ayuda” para que una parte de ese partido “acompañe nuestra posición” y poder así “parar” una ley que contiene una “hipocresía brutal”.

Quienes más “se llenan la boca” hablando de maternidad, denunció, son los que han recortado ayudas a familias monoparentales, mujeres solas, atención a la dependencia, escuelas infantiles o becas de comedor. Si realmente apoyaran la maternidad, añadió, no habrían “sacudido” a las mujeres como lo han hecho.

Valenciano no desveló si encabezará la lista de los socialistas españoles al Parlamento Europeo, algo que resolverá el Comité Federal en marzo, y aseguró que uno de los asuntos centrales en los que el PSOE centrará la campaña, la libertad de las mujeres, puede ser defendido igual por un hombre que por una mujer como cabeza de lista.