La sobrevaloración de activos amenaza la recuperación y sitúa a España al borde de su tercera recesión

- Según el informe de previsiones de EUDE Business School para 2014

MADRID
SERVIMEDIA

La Escuela Europea de Dirección y Empresa (EUDE) advirtió hoy, en su informe de perspectivas económicas para 2014, de que la sobrevaloración de activos amenaza la recuperación y sitúa a España al borde de su tercera recesión.

Según el informe de EUDE Business School, durante el período 2014-2016 se espera un empeoramiento de las condiciones económicas globales, así como un aumento de la aversión al riesgo en los mercados financieros. Con las bolsas altamente sobrevaloradas y ante un excesivo endeudamiento público y privado -derivado de las políticas monetarias anticrisis-, una corrección financiera pondrá en riesgo la débil recuperación de la economía, que podría llevar a España a registrar un PIB negativo del 1% el próximo año.

Lorenzo Dávila, director de EUDE Finanzas, explicó que uno de los componentes que más puede influir ante un cambio de escenario es el volumen de mora real de la economía española. “Si tenemos en cuenta el dato oficial del 13%, los activos incluidos en la Sareb, los activos dudosos no incluidos y los refinanciados que pueden convertirse en dudosos, el impago real en la economía es superior al 20%”, afirmó.

El informe sobre perspectivas macroeconómicas elaborado por EUDE Finanzas prevé que durante el próximo año se registre un proceso de aumento de la aversión al riesgo, algo que se notará con especial impacto en los mercados financieros españoles (bolsa y deuda soberana).

Según explicó Juan Laborda, director de Mercados de EUDE Finanzas, si los mercados incrementan su aversión al riesgo “los tipos de interés a largo plazo repuntarán con fuerza, las bolsas caerán, los diferenciales de crédito se ampliarán, las materias primas se debilitarán y la volatilidad se disparará”.

En ese escenario, agregó, emergerán los problemas de aquellas economías occidentales altamente endeudadas, entre ellas España, y sus sistemas bancarios necesitarán recapitalizarse de nuevo. Se iniciará, a su juicio, “una tormenta perfecta, que se irá retroalimentando: crisis de deuda-crisis bancaria-deflación por endeudamiento. El crecimiento económico se pararía y la recesión se volvería a reactivar”.

De producirse este escenario, continúa el estudio, economías como la española registrarán PIB negativos que podrían llegar al -1%, mientras que su tasa de desempleo no bajaría del 25%. Además, no se lograría reducir el déficit fiscal que se mantendría por encima del 5% del PIB.

DEUDA Y MOROSIDAD

Otro de los factores que, según los autores del informe, ponen en riesgo la débil recuperación estadística es el volumen de deuda. La deuda de la economía española, privada y pública, se aproxima a los 4,4 billones de euros, alrededor del 430% del PIB.

La mayoría de la deuda al principio de la crisis correspondía a las empresas no financieras y a las sociedades financieras. A finales de 2007, de los 3,7 billones de deuda de España, 2,4 pertenecían a las empresas nacionales -financieras y no financieras-, mientras que en la actualidad, de los 4,4 billones, casi 1,3 corresponden a las empresas no financieras y 1,1 a las sociedades financieras.

Por otro lado, según los cálculos de EUDE Finanzas, los activos dudosos en manos de los bancos van más allá de los ya incluidos en el Sareb y se extienden a préstamos y créditos a pymes, a empresas participadas, a créditos hipotecarios sometidos a constantes refinanciaciones. Actualmente la mora bancaria se encuentra en máximos históricos del 13%, frente a niveles del 2% previos a la crisis. Sin embargo, según se especificó en el acto, la mora real supera el 20%.

Según Lorenzo Dávila, “con esta cifra y con la sobrevaloración de los mercados de acciones, es difícil que los bancos, pese a haber sido saneados, estén dispuestos a flexibilizar sus parámetros de riesgo y reactiven el canal de crédito, dado que un incremento de su balance les obligaría a ampliar capital en un momento de fuerte incertidumbre”.

Además, dijo Laborda, “serán necesarias nuevas recapitalizaciones que no deben realizarse a costa de un fuerte incremento de la deuda pública”, ya que, ante el aumento de la aversión al riesgo, las pérdidas en los instrumentos de deuda soberana afectarán negativamente a la banca.

El único capítulo que mantendrá una tasa positiva seguirán siendo las exportaciones, con incrementos esperados del 5% para 2014. El resto de componentes de PIB seguirán mostrando signo negativo (consumo, formación bruta de capital, demanda interna), aunque en menor medida de las tasas registradas a lo largo de 2013.

(SERVIMEDIA)
19 Dic 2013
r/caa