Según el Zoo, el cachorro tiene un excelente estado de salud, pues cuando está a punto de cumplir tres meses ya supera los cinco kilos de peso. El pequeño panda se alimenta las 24 horas de la leche materna, incrementando su peso diario en torno a una media de 50 gramos.

Asimismo la Reina se interesó por la cría y reproducción de los pandas gigantes, una especie calificada en peligro de extinción que está presente en el Zoo Aquarium de Madrid desde 2007, dentro del programa de conservación ex situ.

La historia de esta institución zoológica a través de los osos panda se remonta a 1978, cuando los Reyes realizaron su primer viaje oficial a China. Entonces el Gobierno del país asiático les obsequió una pareja de osos panda gigantes, que en diciembre de 1978 fueron donados al Zoo de Madrid. Cuatro años más tarde, el 4 septiembre de 1982, nació la primera cría en Occidente por inseminación artificial, el famoso ‘Chulín’, que murió en 1996.

Actualmente, tan sólo existen 10 ejemplares de panda gigante en Europa, tres de ellos en Madrid y el resto, en los zoos de Viena, Beauval y Edimburgo. En el mundo, quedan menos de 2.000 ejemplares de esta especie, alrededor de 1.600 en bosques del centro de China y unos 300 en zoológicos y centros de cría.