Cáritas aboga por acabar con el hambre en el mundo en 2030
- Reclama compromiso político a los líderes mundiales, con motivo del Día Mundial de la Alimentación, que se celebra este miércoles
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La red internacional de Cáritas apostó este miércoles por una “política de hambre cero” que ponga en marcha profundas reformas estructurales en varios niveles que aseguren un sistema alimentario sostenible, equitativo y eficaz, capaz de acabar con el hambre en el mundo en 2030 y de alimentar a unos 9.600 millones de personas en 2050.
Ésta es una de las principales propuestas de Cáritas con motivo del Día Mundial de la Alimentación, que se celebra este 16 de octubre, y para lo cual reiteró su llamamiento a los líderes mundiales para que se comprometan en la lucha por la erradicación del hambre y reconozcan el derecho a la alimentación de todas las personas, al tiempo que apostó por el desarrollo de sistemas alimentarios sostenibles.
Para Cáritas, el derecho a la alimentación supone “tener acceso, individual o colectivamente, de manera regular y permanente, a una alimentación cuantitativa y cualitativamente adecuada y suficiente, así como a los medios necesarios para producirla, de forma que se corresponda con las tradiciones culturales de cada población y que garantice una vida física y psíquica satisfactoria y digna”.
Para alcanzar este objetivo, la red internacional de Cáritas propone también apoyar la agricultura ecológica y familiar en los países en desarrollo, por ser más respetuosa con las tradiciones, el medio ambiente y el uso adecuado del agua, así como mejorar los sistemas de producción, almacenamiento, distribución y acceso a los mercados locales, para contribuir a la sostenibilidad de los sistemas alimentarios y productivos de los países pobres.
Evitar la especulación alimentaria, con instrumentos de control que eviten el alza persistente de precios; abandonar de forma gradual la producción de agrocombustibles a gran escala; luchar contra el acaparamiento de tierras, con unas directrices sobre gobernanza responsable de la propiedad de la tierra, la pesca y los bosques, e intentar evitar las consecuencias destructivas del cambio climático son otras de las peticiones de Cáritas para acabar con el hambre en el mundo.
"ESCANDALOSO DESPERDICIO DE LOS ALIMENTOS"
Por otro lado, Cáritas apoya la creación de procesos agroalimentarios que utilicen los recursos de manera eficiente desde los campos de cultivo hasta las mesas; que se apliquen métodos y herramientas para controlar las pérdidas, al tiempo que respeten el entorno, y que atajen “el escandaloso desperdicio de los alimentos que tiene lugar en una parte del planeta, mientras en la otra millones de personas viven con hambre”.
Según el último informe del Fondo de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), unos 842 millones de personas sufrieron hambre crónica entre 2011 y 2013, sobre todo en África, la región del mundo con la prevalencia más alta de malnutrición, hasta el punto de que uno de cada cuatro africanos pasa hambre.
La otra cara del problema está en los países del norte. Según Cáritas Europa, un tercio de los alimentos producidos para consumo humano en el entorno europeo se pierde o desperdicia. “Esta sangrante paradoja es efecto directo de un sistema injusto, que no concibe la alimentación como un derecho humano, que permite la especulación en el precio de los alimentos y que impide una distribución equitativa de los mismos a nivel internacional”, apunta.
(SERVIMEDIA)
16 Oct 2013
MGR