Afganistán. Morenés destaca la "unión imperecedera" con España por la sangre derramada

-El ministro traspasa a las autoridades afganas la base militar de Qala-i-Naw y pone fin a la misión española en la provincia de Badghis

MADRID
SERVIMEDIA

El ministro de Defensa, Pedro Morenés, afirmó este miércoles que España y Afganistán han fraguado una "unión imperecedera" durante los más de diez años de misión militar en este país y destacó que los dos países mantendrán siempre "unos lazos fuertes" porque "esta tierra ha sido regada por la sangre y el sudor de nuestros compatriotas".

Morenés hizo estas declaraciones durante el acto oficial de entrega a las autoridades afganas de la Base de Apoyo Provincial Ruy González de Clavijo, situada en Qala-i-Naw, al norte del país. A partir de ahora las autoridades locales serán las encargadas de controlar la seguridad de la provincia de Badghis, ya que los militares españoles se repliegan a Herat para culminar el regreso a casa en los próximos meses.

"Los lazos que se han creado entre nuestras dos naciones son y serán fuertes porque esta tierra ha sido regada por la sangre y el sudor de nuestros compatriotas, lo que hace que esta unión sea imperecedera y permanezca para siempre", dijo en alusión a los 98 militares españoles que han muerto durante los doce años que ha durado la misión ISAF organizada por la OTAN.

Morenés tuvo un "emocionado recuerdo" hacia los españoles que han fallecido en Afganistán, ya que "han dado su vida hasta las últimas consecuencias luchando por un futuro más seguro, estable y próspero" en esta región de Asia.

El ministro de Defensa suscribió el traspaso del control de la base con el gobernador de la provincia de Badghis, Ahmadullah Alizai; el alcalde de la ciudad de Qala-i-Nar, Abu Baker; y el general Dawood Wadafar, que lidera la 3ª Brigada del 207 Cuerpo del Ejército de Afganistán y que a partir de hoy mismo toma el control de la base militar.

Ante medio centenar de autoridades civiles y militares de Afganistán, Morenés recordó que la presencia de España en Afganistán siempre ha buscado "ayudar al noble pueblo afgano a salir de su difícil situación tras una encarnizada guerra civil y un largo periodo de opresión" y ha supuesto una inversión directa de más de 55 millones de euros sólo en la provincia de Badghis.

Resaltó que en todos estos años han pasado por Afganistán 29.000 militares españoles, los cuales han demostrado una "plena entrega" para recuperar la paz, fomentar la convivencia entre la población, combatir las acciones violentas de los insurgentes y desarrollar importantes proyectos de cooperación en favor de los lugareños.

Morenés se mostró convencido de que los soldados españoles se marchan de Afganistán con una huella "indeleble" en sus corazones después de acudir a este país para tratar de ayudar al pueblo "de una manera desinteresada, de acuerdo con sus intereses y necesidades, con absoluto respeto a sus creencias y siempre dentro de nuestras posibilidades".

"El mejor reconocimiento a la labor que han realizado nuestros soldados y cooperantes es que los colores rojo y gualdo de nuestra bandera permanezcan eternamente en el recuerdo de la gente de esta inolvidable provincia de Badghis", dijo.

Después de Morenés, el gobernador de la provincia de Badghis, Ahmadullah Alizai, tomó la palabra para agradecer a las autoridades españoles la contribución que han tenido en la zona a lo largo de los últimos años y que se ha traducido en más seguridad y mejores infraestructuras para los ciudadabos.

Alizai se comprometió a mantener la paz en la región y manifesto su total compromiso "hasta las últimas consecuencias" en la lucha contra la insurgencia. "Estaremos en la primera línea frente al peligro del terrorismo y nos esforzaremos para alcanzar el mantenimiento de la paz", subrayó.

Terminado el acto, todos los asistentes salieron a la explanada de la base donde estaban izadas las banderas de España, Afganistán y de la OTAN para proceder al traspaso formal de poderes. Los soldados de los dos países retiraron la enseña española mientras sonsaba el himno de España y, acto seguido, arriaron e izaron la bandera afgana como signo de que a partir de ahora son sus tropas las que comandan la Base de Apoyo Provincial Ruy González de Clavijo.

El ministro de Defensa recibió la bandera española de manos de los soldados y la entregó al responsable del contingente para que la guarde consigo hasta su regreso a España, cuando deberá entregarla como signo de la misión cumplida. Fuentes gubernamentales explicaron a Servimedia que hay al menos dos banderas de las que han ondeado en Qala-i-Naw que se guardarán como símbolo para su posterior exhibición en el Museo del Ejército y otras dependencias oficiales.

Morenés mantuvo un encuentro muy emotivo antes de regresar a Herat con una niña afgana, hija de un policía local, que fue trasladada a España para ser curada de una rotura de cadera que le impedía andar. Después de un año de tratamiento en un hospital de Barcelona, se recuperó por completo y hoy volvió a ver al ministro, quien hizo todo lo posible para curarla.

Antes de partir de vuelta a Herat, todos los asistentes posaron para los medios de comunicación en una foto de familia que pasará a la historia por corresponder a la última jornada de trabajos compartidos entre los militares de ambos países.

Este acto de traspaso de poderes supone el final de la misión española en la provincia de Badghis. De los 329 efecticos que hasta hoy contaba en Qala-i-Naw, más de la mitad regresan esta misma tarde en avión a Herat, mientras que el resto pasará una última noche en esta ciudad del norte del país.

Se trata de un grupo de unas 150 personas, que se ha bautizado como "El último infante", que el jueves emprenderán viaje de regreso a Herat por carretera para trasladar todo el material pendiente. El equipo está formado por una unidad de aproximadamente un centenar de hombres, a los que acompañan el equipo médico correspondiente, los ingenieros y demás personal. Además, el convoy está integrado por 37 vehículos militares y 12 civiles.

(SERVIMEDIA)
25 Sep 2013
PAI/man