Caso Faisán. Las defensas aseguran que atribuir el chivatazo a Pamies y Elosua es “una cuestión de fe”

- Visto para sentencia el juicio por la delación a ETA

MADRID
SERVIMEDIA

Las defensas del antiguo jefe superior de Policía del País Vasco Enrique Pamies y del inspector José María Ballesteros solicitaron hoy la absolución de los dos mandos policiales al asegurar que no hay “ninguna prueba” que demuestre que fueron los responsables de la delación que tuvo lugar el 4 de mayo de 2006 en el bar ‘Faisán’ de Irún (Guipúzcoa) y con la que se alertó a ETA de la operación que se iba a llevar a cabo contra su aparato de extorsión. “Son cuestiones de fe que no han quedado acreditadas”, señaló María Ponte, abogada de Pamies.

El letrado José Luis Vegas, representante de Ballesteros, dijo por su parte “se ha pretendido construir una acusación en base a nada” y aseguró que su cliente lleva “siete años sufriendo un calvario”. Vegas y Ponte hicieron estos alegatos en los informes que presentaron esta mañana ante el tribunal del ‘caso Faisán’.

Ambos abogados criticaron que las acusaciones, incluido el Ministerio Fiscal, atribuyan un delito de colaboración con organización terrorista a sus clientes. “Es evidente que con la hoja de servicios de Pamies, afinidad ideológica con ETA precisamente no tiene, más bien todo lo contrario”, destacó la abogada del comisario.

PRUEBAS INSUFICIENTES

Ponte trató de desacreditar las pruebas utilizadas por las acusaciones. Hizo especial hincapié en que la llamada que tuvo lugar a las 11.23 horas “no fue la del chivatazo”. La citada llamada, registrada entre Pamies y Ballesteros a las 11.23 horas, es, según las acusaciones, la sirvió para que el comisario alertase al dueño del bar ‘Faisán’, Joseba Elosua, de la operación antiterrorista que se iba a llevar a cabo.

Ponte explicó en este sentido que el horario utilizado por el equipo investigador, elaborado en base al vídeo de vigilancia con el que se grababa en el exterior del ‘Faisán’, no se ajusta a la realidad y tiene un desfase de seis minutos. La letrada dijo que, por lo tanto y teniendo en cuenta este desfase, la llamada de las 11.23 horas habría tenido lugar cuando Elosua se encontraba en la perfumería de su hija, contigua al bar, y no en el establecimiento, donde tuvo lugar la delación.

Ponte aseguró además que no se han investigado todas las llamadas posibles ya que no se han comprobado las realizadas “desde las redes francesas”, que también dan cobertura a la zona del ‘Faisán’. “Hay 3.000 llamadas sin investigar inferiores a cuatro minutos”, destacó la abogada de Pamies para concluir que la llamada entre su cliente y el inspector Ballesteros “no es la única posible”.

CINTA MANIPULADA

Ponte también criticó especialmente el video de vigilancia con el que se grabó el exterior del bar ‘Faisán’ en la mañana del ‘chivatazo’ y aseguró que esa cinta “esta manipulada” ya que contiene un corte después de que Elosua entrase en el establecimiento.

La letrada también impugnó la baliza instalada en el coche de Elosua y con la se grabó la conversación que mantuvo el dueño del bar ‘Faisán’ con su yerno, Carmelo Luquín, cuando se desplazaron a Francia tras recibir el ‘chivatazo’. El objetivo de este desplazamiento era alertar al miembro del aparato de extorsión de ETA José Antonio Cau Aldanur de la operación que se iba a llevar a cabo contra la banda terrorista.

En ese trayecto, Elosua le relató a su yerno el contenido de la conversación que acababa de mantener y subrayó que su interlocutor le había dicho que era necesario “no fastidiar el proceso” y le habló de la “situación política”.

Ponte aseguró que las acusaciones basan sus relatos de hechos en “hipótesis” y criticó especialmente al fiscal encargado del caso, Carlos Bautista, por acusar de mentir a “nueve funcionarios del Cuerpo Nacional de Policía” que han corroborado la versión de Pamies.

COARTADA REAL

La abogada también defendió la coartada de Pamies y Ballesteros, que ha sido duramente criticada por las acusaciones. Según esta tesis exculpatoria, Pamies no tuvo nada que ver con el chivatazo si no que ese día, el 4 de mayo, se iba a reunir en el sur de Francia con un miembro de ETA apodado ‘Romano’ que era confidente suyo. Según esta versión, el jefe superior de Policía en el País Vasco envió a Ballesteros a la zona del ‘Faisán’ para que comprobase si era seguro cruzar la frontera con Francia para poder reunirse con su confidente.

“No es una coartada ficticia ni inventada”, afirmó Ponte antes de añadir que esta versión de los hechos ha sido confirmada por el propio confidente y por tres mandos policiales que “no han venido a mentir ni a hacer un favor a su amiguete”.

El abogado de Ballesteros, José Luis Vegas, destacó por su parte las “deficiencias en la instrucción” y reiteró que “se ha pretendido construir una acusación en base a nada”.

“Claro que hubo un ‘chivatazo’ y tuvo motivaciones políticas, pero es que no fueron ellos”, explicó ante el tribunal.

Vegas también criticó las pruebas aportadas por las acusaciones y afirmó que la cinta de vigilancia con la que se grabó el exterior del bar ‘Faisán’ en la mañana del 4 de mayo de 2006 “ha sido manipulada intencionadamente”.

El letrado hizo mención especial a los argumentos del fiscal Bautista. “No se puede faltar al respeto al Cuerpo Nacional de Policía en su conjunto y acomodar los testimonios a sus intereses”, censuró.

Vegas llegó a comparar a Bautista con el exentrenador del Real Madrid José Mourinho y dijo que la Fiscalía reaccionará a la sentencia de la Audiencia Nacional con expresiones como “por qué, por qué”.

Bautista decidió mantener el delito de colaboración con organización terrorista en su acusación contra Pamies y Ballesteros, para los que pide cinco años de cárcel por la colaboración con organización terrorista y, alternativamente, dos años de cárcel para el comisario y un año y medio para el inspector por un delito de revelación de secretos y, alternativamente. Las acusaciones populares piden hasta diez años de cárcel para los procesados.

Tras escuchar los argumentos de las defensa, el presidente de la Sección Tercera de lo Penal de la Audiencia Nacional, el magistrado Alfonso Guevara, decretó el visto para sentencia.

(SERVIMEDIA)
23 Sep 2013
DCD