En verano se registra uno de cada cinco resfriados que se contabilizan durante el año

MADRID
SERVIMEDIA

Pese a la benigna climatología, en verano también se registra un significativo número de resfriados. La Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (Separ) estima que en los meses estivales se producen el 20% del total de los resfriados que se contabilizan en un año, debido sobre todo a los cambios bruscos de temperaturas por los baños, los viajes y el aire acondicionado.

El resfriado es un proceso vírico que afecta a las vías aéreas superiores, provocando la inflamación de la mucosa nasal, la garganta y la laringe. La sintomatología, aunque no suele ser grave, sí es muy molesta: dolor de cuello, dolor de cabeza, mucosidad, tos y estornudos, falta de apetito y debilidad general. El resfriado tiene su origen en más de 200 virus que pueden atacar en cualquier momento.

El constipado común suele durar entre tres días y una semana. Si los síntomas perduran más tiempo o se cogen resfriados con demasiada frecuencia, es recomendable ir al médico. Los neumólogos recuerdan que las secuelas de un constipado mal curado pueden ser graves en niños, ancianos o personas que por diversos motivos estén bajas de defensas. La infección puede pasar a los pulmones y convertirse en una enfermedad grave.

PREVENCIÓN Y TRATAMIENTO

Para disfrutar de unas vacaciones saludables, los neumólogos destacan la importancia de mantener una vida activa, realizando ejercicio de forma regular, ya que fortalece el sistema de defensas del organismo. Explican que es mejor repartir el deporte en sesiones cortas pero cotidianas que realizar un día un gran esfuerzo físico y después estar varias jornadas sin practicar ejercicio.

También aconsejan mantener en viviendas y lugares de trabajo y ocio una temperatura entre 22 grados y 24 grados, con una humedad de alrededor del 30% en el interior de viviendas y locales, ya que así se evita la sequedad excesiva del ambiente, que reseca las mucosas nasales, impidiendo que actúen como primera línea defensiva del sistema respiratorio frente a los virus.

Los especialistas recuerdan, además, que es muy importante no tratar un simple resfriado con antibióticos, salvo por prescripción médica. El constipado suele ser motivo a menudo de automedicación por parte de los enfermos ante lo molesto que resultan los síntomas y a pesar de su poca gravedad. Sin embargo, la medicación con antibióticos tiene efectos contraproducentes, ya que puede provocar resistencias y predisponer al organismo a sufrir infecciones graves en el futuro debidas a bacterias y gérmenes que han aprendido a vencer el efecto terapéutico de los antibióticos.

(SERVIMEDIA)
15 Ago 2013
DMM/gja/caa