Este año, la Tarjeta Inter-Rail presenta como novedad la distribución en zonas del mapa europeo comprendido en el alcance del convenio, de forma que los precios varían dependiendo de si se quiere recorrer una o varias zonas geográficas.

La primera zona incluye Gran Bretaña e Irlanda; la segunda son Suecia, Noruega y Finlandia; la tercera abarca Dinamarca, Alemania, Suiza y Austria; en la cuarta están Polonia, República Checa, Eslovaquia, Hungría, Croacia, Bulgaia y Rumanía; la quinta zona está enmarcada entre Francia, Bélgica, los Países Bajos y Luxemburgo; la sexta zona se extiende por España, Portugal y Marruecos, y la séptima zona está en Italia, Eslovenia y los servicios marítimos entre Brindisi y Patras, Grecia y Turquía.

La oferta de Inter-Rail propone cuatro alternativas: Una zona (15 días): 32.550 pesetas; dos zonas (30 días): 38.750 pesetas; tres zonas (30 días): 43.400 pesetas, y cuatro zonas (30 días): 48.825 pesetas. Hay que tener en cuenta que a tarjeta no cubre los traslados dentro del propio país, y sólo es valedera a partir del momento en que se cruza la frontera.

Según este plan, un joven español puede viajar hasta Laponia o Estambul, con todas las paradas intermedias que desee, por 43.400 pesetas, ya que sería necesario atravesar tres zonas, pero puede también pasar quince días recorriendo Francia y los Píses Bajos (una sola zona) por 32.550 pesetas.

Estas zonas se han establecido de acuerdo con los resultados de diferentes estudis y de diversas encuestas entre los viajeros, y la combinación de zonas responde a los principales flujos de tráfico, al tiempo que permite a los usuarios grandes posibilidades de elección.

Según los promotores de la tarjeta, con un ejemplar válido para tres zonas es posible atravesar Europa entera. Teniendo en cuenta que, según los estudios realizados, un viajero de Inter-Rail recorre como media 6.500 kilómetros y visita seis países, con la nueva fórmula ese viaje se puede hacer con una tarjeta válid para dos zonas.