El cese de la planta nuclear, tal y como establece la orden, se produjo el pasado sábado 6 de julio, día en el que expiró la autorización de explotación que tenía concedida la empresa Nuclenor, participada a partes iguales por Endesa e Iberdrola.

El cierre de Garoña, como recoge la orden ministerial firmada por el secretario de Estado Alberto Nadal, por delegación del ministro, recoge que Nuclenor seguirá siendo la titular de la planta.

Garoña sigue, por tanto, en la situación de parada que comenzó en diciembre de 2012 a raíz de la entrada en vigor de los nuevos impuestos que, según la compañía, hacían inviable la situación económica de la central.

En el anexo de la orden, se establece que anualmente el titular realizará una revisión del Estudio de Seguridad en Parada.

La solicitud de la autorización de desmantelamiento, como recuerda la orden ministerial, deberá presentarse con un año de antelación al inicio previsto del mismo.

Esta situación, como avanzó la propia vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, se podría modificar ya que el cese de la actividad es por “motivos económicos y no de seguridad”, oor lo que el Ministerio de Industria, Energía y Turismo, “va a iniciar las modificaciones normativas necesarias para contribuir a que pueda continuarse con la actividad en la instalación si fuera posible”.

La propia Nuclenor, en su comunicado, dijo que "no renuncia a la posibilidad de solicitar una renovación de la autorización de explotación de la central en caso de que las condiciones así lo permitiesen".