Este cálculo ha sido realizado por la Unión Federal de Policía (UFP), quien ha denunciado que se realice este gasto en un momento de crisis económica.

Según aseguró la UFP, a través de un comunicado, la cifra de 10 millones de euros la han calculado a partir de la valoración de las horas de trabajo policial consumidas en los distintos partidos de la competición de fútbol nacional.

En concreto, los partidos de alto riesgo de la Liga supusieron un gasto en seguridad pública de 3.420.000 euros, casi la mitad de los recursos de seguridad de Primera División. Además, los partidos de media y baja intensidad tuvieron un coste de 7.489.800 euros.

A eso hay que sumar el coste de segunda división y regional que según fuentes de las Unidades de Intervención Policial consumen “algo menos de la mitad que la primera división”. Es decir, más de 10 millones de euros.

Por este motivo, la UFP reclama “que los clubes financien su seguridad con cargo a un canon, como ya ocurre en la vuelta ciclista a España”. Este sindicato policial sostiene que no quieren “la privatización policial defendemos el servicio público, por eso queremos que cuando se detraigan recursos públicos para una actividad privada que deja taquilla y beneficios sea impuesto un canon”.

Estos representantes de los policías nacionales aseguran que estos funcionarios son “los únicos que somos capaces de dar esa seguridad con garantías y profesionalidad. Lo que pedimos es que puesto que se están consumiendo recursos públicos, las empresas lo paguen”.