Margallo admite que los ajustes en España se han hecho aumentando los ingresos más que recortando el gasto

- Asume que en esta crisis económica se sabe qué ha pasado pero "no sabemos cuál es la solución"

MADRID
SERVIMEDIA

El ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, José Manuel García-Margallo, reconoció hoy que los ajustes que se han hecho en España se han llevado a cabo “mucho más en términos de aumento de ingresos que de contracción del gasto, entre otras cosas porque es el procedimiento más rápido”.

García-Margallo aceptó implícitamente así, en el coloquio que siguió a su intervención en el Foro Cinco Días, una de las críticas que han arreciado en las últimas semanas contra el Gobierno desde posiciones liberales: la de que, violando sus promesas electorales, ha incrementado los impuestos en lugar de adelgazar la Administración y moderar el gasto público.

“Es cierto que los ajustes que se han hecho ahora en los países que han tenido que hacerlos, y el nuestro no es una excepción, se han basado mucho más... en términos de aumento de ingresos que de contracción gastos, entre otras cosas porque es el procedimiento más rápido”, reconoció el ministro

Margallo contradijo en cierto modo a la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, que en el Consejo de Ministros del pasado 3 de mayo aseguró que los datos demuestran que el 62% del recorte del déficit se ha llevado a cabo mediante la reducción de gastos y el 38% a través del aumento de los ingresos.

"NO SABEMOS LA SOLUCIÓN"

Por lo demás, en un discurso de marcado carácter económico como correspondía a la naturaleza de ‘Cinco Días’, Margallo esbozó su tradicional comparación entre las crisis económicas de 1929, 1973 y la actual y distinguió que, mientras en las crisis anteriores se adoptaron respuestas articuladas que llevaron a la solución, en ésta, aunque se sabe qué ha pasado, "no sabemos cuál es la solución y empezamos a pensar que lo que estamos haciendo no es suficiente o las medidas no han sido adoptadas a tiempo”.

También contrapuso, como es habitual en él, el modelo “anglosajón” para salir de la crisis y el europeo continental, que a su juicio habría que cuestionar puesto que la UE es la única región del mundo que sigue sin recuperar el crecimiento. Uno de los puntos que criticó es que, al no ejercer el BCE plenamente su potencialidad de banco central, las empresas españolas han de pagar por los créditos que piden casi cinco veces lo que pagan las alemanas.

En estas circunstancias, puso de manifiesto, “carece de sentido” alegar que una ayuda fiscal de un estado a una empresa suya es contraria a las normas de la libre competencia, puesto que la diferencia en el interés que pagan las empresas de un país y otro por financiarse es “una negación pura y simple de la libre circulación de capitales y una distorsion de la libre competencia como no se ha conocido otra desde que se puso en marcha la Comunidad Económica Europea”.

Finalmente, Margallo expuso su tesis de que la UE debe avanzar hacia el gobierno económico en varias fases, que culminarían en unos eurobonos solidarios hasta, en principio, un nivel de deuda soberana del 60% del PIB del estado en cuestión. Esta mutualización de la deuda sería, a su juicio, el paso decisivo para llegar a una Europa federal que le parece, en términos marxistas, la única forma de “acomodar la superestructura política a la infraestructura económica” de los tiempos actuales.

(SERVIMEDIA)
14 Mayo 2013
KRT