Larreina insistió en la comparecencia de Rajoy para explicar su nuevo plan de reformas que es imprescindible “cambiar de política” y poner en marcha propuestas “radicales” que contarían con el respaldo de Amaiur.

Pero la intervención del presidente no inspiró confianza al diputado independentista al que “preocupa la agenda oculta” del Gobierno y de la Troika que “persiste en el error”. “Con las mismas políticas”, advirtió, sólo se pueden conseguir “los mismos resultados”.

Por eso, Larreina pidió a Rajoy que “deje de hacerse trampas en el solitario. (...) Plántese ante la señora Merkel , plántese ante la Troika, plántese ante ese proceso de destrucción europea, de destrucción de una Europa en que la ciudadanía está cada vez más olvidada”.

En nombre de ERC, Alfred Bosch denunció que el Gobierno prevé para Cataluña un recorte del gasto de 3.800 millones de euros, “mucho más” que los 3.000 millones de ajuste que contempla el nuevo plan del Ejecutivo para todo el Estado.

Esas cifras, advirtió el portavoz independentista, “se traduce en sufrimiento” para la población de Cataluña y “supera el nivel de tragedia griega”.

Además, Bosch pidió al presidente del Gobierno que defienda

la Carta Europea para las Lenguas Regionales y Minoritarias del Consejo de Europa y la protección de todas las leguas cooficiales del Estado.

En representación del BNG, Olaia Fernández Dávila, denunció la “falta de ideas de un Gobierno agotado” y criticó que el presidente haya anunciado que “no hay cambio de rumbo”.

El portavoz de Coalición Canaria (CC), Pedro Quevedo, criticó que Rajoy se haya “complacido en relatar el fracaso de sus políticas” y haya “tirado la toalla” sin la “más leve autocrítica, ni el más mínimo atisbo de cambio”.

Joan Baldoví, portavoz de Compromís, exigió una reforma de la normativa laboral porque con ésta está floreciendo una nueva categoría social, “el precariado”, que consagra las “desigualdades”.

Las políticas del Ejecutivo, dijo, nos llevan a cavar “más hondo” en la supresión de derechos, en los recortes en sanidad y educación , en reducir la administración al mínimo imprescindible, argumentos que deberían a impulsar a Rajoy a “pedir perdón” a los ciudadanos.

En representación de Foro Asturias, Enrique Álvarez Sostres, aseguró que el nuevo plan de reformas son “meras correcciones”, que certifican la “la fatalidad de un destino” que es una “auténtica tragedia nacional” y “un infierno de desesperanza”.

Ante este panorama, Álvarez instó al Gobierno a intentar acuerdos y le dijo directamente a Rajoy que “si un día se reencontrase con la humildad” y se alejara “del meritoriaje y del bastardismo podríamos encontrarnos” y llegar a acuerdos.

Por su parte, Carlos Salvador, de UPN, expresó su respaldo a los planes del Gobierno porque “hoy las reformas no son una opción, son una necesidad”. Únicamente le pidió que “cuando pueda tenga un gesto con los emprendedores y reduzca sus cargas sociales”.

Finalmente, la portavoz de Geroa Bai, Uxue Barkos, insistió en que hay alternativas a la política del Gobierno y pidió a Rajoy “valentía e insumisión a aquellas imposiciones políticas y económicas, que dos años después ya no sirven”. Su principal propuesta fue la de comprometer al Gobierno a emplear el ahorro que está produciendo la bajada de los intereses del bono español a diez años en promover la creación de empleo.