El magistrado ha decidido archivar la causa al concluir que Gastearena no cometió un delito de enaltecimiento del terrorismo, según señalaron fuentes jurídicas. En su declaración ante Andreu, que tuvo lugar el pasado 13 de marzo, el regidor de Bildu dijo que “es incomprensible que esto se catalogue como enaltecimiento, la normalización política no llega pese al cese de la actividad armada”.

La Fiscalía sostenía que el alcalde homenajeó en el citado acto a varios presos etarras, entre ellos a Txetxu Barrios, el asesino de Alberto Jiménez Becerril, concejal del PP en el Ayuntamiento de Sevilla, en 1998.

El imputado explicó ante el juez que, después del ‘chupinazo’ con el que se dio inició a las fiestas del pueblo, acudió “a título personal” a un acto organizado por la organización a favor de los presos etarras Herrira, en donde se quedó “en la parte de atrás”. El alcalde dijo que en el acto ni se profirieron “goras” a ETA ni se nombraron a presos concretos de la organización terrorista. “En el acto solo se pidió respeto a los derechos de los presos”, señaló.

Gastearena también explicó que en las fiestas de Villaba existe un espacio “para la reivindicación” y señaló a modo de ejemplo que, durante el ‘chupinazo’, los trabajadores del Ayuntamiento portaban camisetas con lemas contra los recortes en las administraciones. El alcalde también aseguró que el proceso abierto contra él es una cortina de humo levanta por UPN para tapar la corrupción.