Dos escoltas se ponen en huelga de hambre para conseguir un trabajo en la cárcel
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Dos escoltas se han puesto en huelga de hambre en Cádiz para pedir que se les contrate dentro del nuevo servicio de vigilancia privada de la cárcel de Botafuegos, en Algeciras.
Según informó la Asociación de Escoltas del País Vasco y Navarra, los guardaespaldas que están protagonizando este ayuno (Miguel Guerrero y José Vega) están realizando su protesta a las puertas de la prisión y llevan una semana sin ingerir alimentos.
Esta asociación escoltas, que preside Santiago Fontenla, explicó que estos compañeros quieren reclamar un puesto de trabajo a la empresa de seguridad Sabico, que ha sido adjudicataria de los servicios de vigilancia en esta cárcel gaditana.
Fontela afirmó que su colectivo esperaba el cumplimiento de la promesa del Ministerio de Interior, que prometió recolocar escoltas en los nuevos puestos de trabajo que se crearían para los vigilantes de seguridad en algunas cárceles de territorio nacional.
“PROMESA INCUMPLIDA”
En este sentido, este representante de los guardaespaldas denunció que "el Gobierno no ha cumplido con lo prometido y no se está dando prioridad a escoltas que trabajaron en el País Vasco y Navarra, dejando en manos de las empresas las decisiones dirigidas a cubrir esos puestos de trabajo".
"Nuestro colectivo denuncia que no existe control para comprobar que sean los escoltas quienes optan a los puestos de trabajo, dejando al antojo de las empresas que coloquen a quien quieran en esos puestos", señaló Fontenla.
A este respecto, adelantó que "al igual que está sucediendo en Algeciras, más escoltas se preparan para protestar frente a las prisiones que contarán con personal de seguridad privada".
Por otra parte, Fontenla afirmó que han podido comprobar cómo los sindicatos “no muestran interés por solucionar nada y se muestran sumisos a los intereses de las empresas con las que desde hace años mantienen relaciones de complicidad, dejando indefensos a los escoltas”.
AL BORDE DEL DESAHUCIO
Esta asociación de guardaespaldas recordó a los sindicatos “que se mantienen gracias a los afiliados y que deben mantener con los escoltas el grado de confianza que se les suponía y que ahora desde la asociación les exigimos”.
Por último, Fontenla destacó "la delicada situación que viven los cerca de 250 escoltas vascos que ahora mismo se encuentran en paro y en una difícil situación de supervivencia laboral en el País Vasco”.
Argumentó que tras “haber servido al constitucionalismo y a la democracia ven como es imposible acceder al mercado laboral en Euskadi, siendo tratados como verdaderos 'apestados' en su propia tierra. Si la situación laboral de más de 3.000 escoltas es delicada en toda España, en el País Vasco adquiere matices dramáticos, estando varios escoltas al borde del desahucio".
(SERVIMEDIA)
03 Abr 2013
NBC