Fernández vincula la crisis con el “pulso que le echa el soberanismo al autonomismo”

- “La independencia de Cataluña siempre será un asunto de España”, afirma

MADRID
SERVIMEDIA

Javier Fernández, presidente de Asturias, afirmó hoy en el Fórum Europa que la crisis actual “tiene mucho que ver con el pulso que el soberanismo le está echando ahora al autonomismo en España”.

En su comparecencia en el acto convocado por Nueva Economía Fórum, explicó que las tensiones entre comunidades autónomas se deriva “de la existencia de partidos nacionalistas, que es el auténtico hecho diferencial de España”.

“Podemos discutir si conviven una o varias naciones en esta geografía, pero lo indiscutible es que habitan nacionalistas y que es gente que se organiza y que no puede renunciar” a la independencia. Nacionalistas, agregó, “que solo entienden la autonomía como un peldaño, como una especie de estación en tránsito”.

Recodó que tras la restauración democrática, los nacionalistas han contado “con una ventaja extraordinaria que les han permitido tener poder” y treinta años después del ‘café para todos’, los nacionalistas “dicen ahora que la cafetera no da para más”.

En este punto, afirmó que “no hay Estado que resista a una doble tensión antagónica y permanente” como la que padece en función de la presencia de ideologías nacionalistas, y “eso debemos empeñarnos" en solucionarlo.

Como punto de partida, “debemos transitar por el consenso”, pues España, subrayó, “necesita hoy grandes consensos para grandes cambios”, en el marco de unas reformas que “necesitan de todos, del máximo acuerdo”, a partir de la idea de que tales modificaciones no son epidérmicas, son medulares”. En este ámbito, habló de la reforma de la Constitución, actuación que estimó “sensata” y que “es la mejor manera de preservarla y reforzarla”.

ESPAÑA FEDERAL

Por otra parte, el jefe del Ejecutivo asturiano aseguró no tener “ningún problema” en usar el término federal a la hora de debatir sobre el futuro modelo de país. “De hecho”, dijo, “el Estado autonómico es la fórmula un poco vergonzante que adopta en España el Estado federal”.

En cualquier caso, avisó, “no me interesa un debate de nominalismos”, y, aunque admitió que la denominación no es indiferente, “llámese como se llame, la urgencia es acabar con la tensión continua a la que está sometida el Estado”.

“El auténtico federalismo”, comentó, “supone abandonar la idea de que existe un centro monopolizador, y en eso, en una país donde la tensión es entre periferia y Madrid, tiene un incuestionable valor simbólico”.

Insistió en que España “es en la práctica un Estado federal”, si bien “mejorable”, al tiempo que lamentó que “hemos construido un federalismo del revés, por desagregación, en lugar de la forma normal, por agregación”.

Con todo, apuntó, el modelo futuro “no tiene por qué ser ni arbitrario ni discrecional”, y en este punto destacó que “me importa el compromiso entre federalismo y solidaridad”, mientras que subrayó que aspiraciones en marcha, de modo unilateral por parte de la Generalitat, como es el de “la independencia de Cataluña, siempre será un asunto de España”.

(SERVIMEDIA)
28 Feb 2013
LMB/gja