Entre el 20 y el 40% de los enfermos de Parkinson sufre depresión desde el inicio

MADRID
SERVIMEDIA

La depresión en los casos de Parkinson, que afecta desde su inicio a entre el 20 y el 40% de los enfermos, dificulta y retrasa el diagnóstico de la enfermedad. Pero los expertos explican que la apatía y la falta de atención son síntomas más claros para detectar el Parkinson y destacan que es una enfermedad muy heterogénea en sus manifestaciones y en su evolución.

El doctor Juan Carlos Martínez Castrillo, neurólogo especializado en Trastornos del Movimiento, señaló hoy en rueda de prensa la importancia de diagnosticar la enfermedad en sus fases iniciales. “Que el diagnóstico se produzca en ese momento supone un doble beneficio para el paciente. En primer lugar, acaba con la incertidumbre de no saber qué le sucede, sabiendo a lo que tiene que enfrentarse. En segundo, se ha demostrado que los pacientes que reciben antes un tratamiento tienen mejor calidad de vida que los que no lo reciben”, explicó.

En los inicios de la enfermedad es cuando se obtiene la mejor respuesta de los fármacos. A este periodo se le denomina ‘luna de miel’. El doctor Martínez destacó dos tipos de pacientes: “Cuando la enfermedad se manifiesta por temblor, la consulta al neurólogo suele ser más temprana que cuando la enfermedad se manifiesta por torpeza motora o dolor".

Los expertos insisten en la necesidad de cambiar la percepción de la enfermedad. El diagnóstico del Parkinson oscila entre los 18 meses y varios años desde el inicio de los síntomas. El desconocimiento de todos los síntomas determinantes, junto a los estereotipos alrededor de la enfermedad, influyen en esta demora. El tratamiento general se basa en la unión de terapias farmacológicas, rehabilitadoras y neuropsicológicas.

Los factores de riesgo para contraer la enfermedad son las intoxicaciones, las infecciones, la vida en el medio rural, el colesterol LDL bajo, la obesidad y los efectos secundarios de fármacos. Como factor protector se ha visto que las personas fumadoras son menos proclives a contraer la enfermedad, pero eso no quiere decir que los expertos recomienden fumar, ya que los efectos provocados por el tabaco siguen siendo muy nocivos para la salud.

Las asociaciones son importantes para sobrellevar la enfermedad, ya que en ellas se realiza una rehabilitación completa, que consideran necesaria para la independencia del paciente. Esta rehabilitación se basa en fisioterapia para mantenimiento de la movilidad, estabilidad y coordinación, logopedia para la solución de los problemas de comunicación, terapia ocupacional para la evaluación de las limitaciones del día a día del paciente, y musicoterapia para desarrollar las capacidades motrices, cognitivas y de comunicación.

(SERVIMEDIA)
24 Ene 2013
JPV/caa