Según AUGC, el único objeto de esta “práctica abusiva” es recaudar más dinero. Esta asociación también sostiene que se está expedientando a aquellos miembros del cuerpo que denuncian estas sanciones a los efectivos de Tráfico.

En este sentido, este colectivo de la Benemérita afirma que los agentes del destacamento de tráfico deben poner un mínimo de 50 multas al mes, algo que les da derecha a cobrar el plus de productividad.

A juicio de AUGC, esta práctica ha convertido a los guardias civiles que patrullan las carreteras “en cajas registradoras de las arcas del Gobierno”. Para esta asociación, de esta forma se desnaturaliza la sección de Tráfico de la Guardia Civil, que fue creada para “primar la vigilancia y control del tráfico, los servicios humanitarios y otros servicios de vital importancia”.

Este colectivo de agentes denuncia que no llegar a las 50 multas al mes puede hacer que los guardias vean su nómina reducida entre 200 y 500 euros.

La AUGC apunta que exigir a los guardias que pongan un número mínimo de multas pone “en entredicho la gran confianza depositada” en la Benemérita, ya que lo que hace es “fomentar la competencia” entre agentes o “crear cupos de denuncias”.

Por este motivo, esta asociación de la Benemérita pide a su director general, Arsenio Fernández de Mesa, “que retire este método evaluativo por discriminatorio”, puesto que al mismo se oponen tanto los agentes como los mandos, ya que estos últimos “también presionados para aumentar el número de denuncias”.