Nacho Vidal emitía facturas falsas y desviaba dinero para la trama de Gao Ping
- Según el sumario del ‘caso Emperador’
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El actor y director porno Ignacio Jordá, más conocido como Nacho Vidal, utilizaba su productora para emitir facturas falsas y realizar transferencias internacionales con las que presuntamente se desviaba y blanqueaba parte de las ganancias de la trama mafiosa liderada por el magnate chino Gao Ping.
En el sumario del ‘caso Emperador’, al que ha tenido acceso Servimedia, se recogen las actividades supuestamente delictivas de Nacho Vidal y de su hermana, María José Jordá, detenidos ambos en la operación contra la red de Ping e imputados en la Audiencia Nacional.
Los fiscales encargados del caso, Juan José Rosa y José Grinda, aseguran en un escrito recogido en el sumario que el actor porno y su hermana utilizaban la sociedad “Vidal Production” para la emisión de facturas falsas que se destinaban a justificar las transacciones internacionales de la red. También recibían mensualmente de Estados Unidos transferencias de dinero “de una forma fuera de lo legalmente establecido”.
Según los fiscales, estas cantidades “irían directamente a la República Popular de China” y posteriormente le eran entregadas en efectivos “con lo que podrían ingresarlas en sus cuentas abiertas en el Principado de Andorra sin proceder a su declaración”.
Del sumario se desprende en este sentido que la trama de Ping, además del traslado del dinero por vía terrestre a lugares como Hungría, desde donde se transfería a China, o el envío de pequeñas cantidades a través de las agencias de transferencias camufladas como remesas de inmigrantes, recurrían a empresarios para evadir el dinero obtenido ilegalmente.
Anticorrupción subraya que la red se dedicaba a la “captación de personas, generalmente empresarios con alto volumen de negocio, a menudo de venta de una multiplicidad de servicios y bienes ‘al por mayor’, que generaban consecuentemente una ingente cantidad de capital líquido, los cuales jugarían el papel de clientes, actores o donantes de grandes capitales de capital ‘cash’ o ‘billetes pequeños’”.
Estos donantes “se encargarían de entregar en mano elevadas sumas de dinero en metálico a diferentes integrantes de la organización criminal, los cuales, mediantes sus diferentes contactos nacionales e internacionales, se encargarían de reintegrar el equivalente a dichas sumas de dinero, desde diferentes cuentas bancarias repartidas por diversos países en los que existen menores controles gubernamentales y fiscales a las transacciones internacionales, algunos de ellos de los denominados paraísos fiscales como Suiza, Panamá o Hong Kong”.
Dentro de esta trama de evasión y blanqueo de capitales, la red contaba con los servicios de una organización “compuesta en sus posiciones jerárquicas por individuos de origen o ascendencia hebrea” y que se dedicaba a estos fines “de forma profesional y altamente especializada”.
(SERVIMEDIA)
04 Dic 2012
DCD