En virtud de este acuerdo, el FROB suscribirá un aumento de capital en Banco de Valencia por importe de 4.500 millones de euros, transmitiendo posteriormente el FROB su participación íntegra en Banco de Valencia a CaixaBank por el precio de un euro.

Previamente a la recapitalización y según establece la legislación, los accionistas actuales soportarán las pérdidas en las que haya incurrido la entidad.

Además, se concede a Banco de Valencia un esquema de protección de activos por el que, durante un plazo de diez años y para una cartera de activos predeterminada, el FROB asumirá el 72,5% de las pérdidas derivadas de dicha cartera una vez absorbidas las provisiones constituidas a 30 de septiembre sobre estos activos.

Al mismo tiempo, se llevará a cabo la realización de acciones de gestión de instrumentos híbridos de capital y de deuda subordinada teniendo en cuenta los criterios establecidos en el artículo 45 de la Ley 9/2012.

En cuanto al ahorro de costes, la entidad estima que para 2014 serán de unos 85 millones de euros anuales y de unos 233 millones de costes de restructuración brutos.

BANCO MALO

El acuerdo también fija el traspaso a la Sociedad de Gestión de Activos Procedentes de la Reestructuración Bancaria (Sareb) de inversiones y riesgos de naturaleza inmobiliaria de conformidad con los términos del Real Decreto 1559/2012, de 15 de noviembre, por el que se establece el régimen jurídico de las sociedades de gestión de activos.

El plan de resolución de Banco de Valencia ha sido sometido a las autoridades de competencia

de la Unión Europea junto con los correspondientes al resto de las entidades participadas por

el FROB. Está previsto que su decisión sobre la aprobación de estos planes se produzca

mañana miércoles.

Banco de Valencia está siendo administrado por el FROB desde el 21 de noviembre de 2011 y

está operando con normalidad con sus clientes y acreedores. "Esta operación de integración

con Caixabank contribuye a asegurar su solidez financiera y garantiza su viabilidad", explica el FROB.

El pasado 21 de junio, la Comisión Rectora del FROB acordó el aplazamiento temporal de los procesos de venta de Banco de Valencia y Catalunya Banc, mientras se concretaban los resultados de los procesos de valoración que se estaban llevando a cabo por Oliver Wyman, así como las condiciones del apoyo financiero.

Pero el FROB decidió, una vez culminados los ejercicios sobre necesidades de capital de la banca española, reanudor los procesos de venta de Banco de Valencia y Catalunya Banc.

CAPITAL

Tras la operación, el ratio pro-forma a 30 de septiembre 2012 de Core Capital Basilea II se situaría por encima del 11%, manteniéndose asimismo una situación de liquidez superior a los 50.000 millones de euros.

Además, CaixaBank espera que la adquisición tenga un impacto positivo en el beneficio por acción desde el primer año.

El cierre de la operación, según los cálculos de la entidad catalana, tendrán lugar en el primer trimestre del próximo ejercicio 2013.

Banco de Valencia cuenta con unos activos por valor de 20.704 millones de euros. Además, los créditos netos alcanzan los 15.227 millones, mientras que los depósitos se sitúan en los 11.425 millones.

La entidad contaba actualmente con 423 oficinas, algo más de 400.000 clientes y un total de 2.113 empleados.

Según los datos aportados por CaixaBank, el 74% de las oficinas de Banco de Valencia están en Castellón, Valencia, Alicante y Murcia.

Esto supone que la cuota de mercado en Comunidad Valenciana y Murcia es del 5,3% en depósitos y 6,21% en oficinas.