27 AÑOS DE CÁRCEL PARA UN HOMBRE QUE COLABORÓ CON ETA EN EL ASESINATO DE UN NARCOTRAFICANTE
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La Audiencia Nacional condenó hoy a 27 años de cárcel al colaborador etarra Miguel María Ibáñez Oteiza por haber sumistrado a la banda terrorista la información utilizada para el asesinato del presunto narcotraficante Francisco Javier Zabaleta en 1988.
Los magistrados de la Sección Segunda de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional, presididos por el juez Ángel Hurtado, han encontrado a Ibáñez Oteiza culpable de un delito de asesinato en calidad de autor.
Según se recoge en la sentencia hecha pública hoy, los magistrados consideran probado que en la década de los 80 Ibáñez Oteiza realizaba para ETA labores de información sobre posibles objetivos, daba cobertura a los etarras, prestaba alojamiento y ocultaba el material utilizado por los comandos.
Ibáñez se dedicó fundamentalmente a realizar estas labores de apoyo para el "comando Eibar", que comenzó a actuar en la zona de Guipúzcoa en 1984. En él estaban integrados los etarras Jesús María Ciganda, Juan Carlos Balerdi y Fermín Urdiain, todos ellos detenidos el 16 de abril de 1989.
Tras la orden de la cúpula de la banda terrorista de atentar contra personas que se dedicaban al tráfico de drogas, Ibáñez señaló como objetio a Francisco Javier Zabaleta, efectuó labores de localización y vigilancia sobre él y, finalmente, facilitó la información a los miembros del "comando Eibar".
Gracias a esta información, los etarras Ciganda, Balerdi y Urdiain, en la noche del 6 de junio de 1988, se desplazaron a la localidad guipuzcoana de Elgoibar y, acercándose por la espalda, asesinaron a Zabaleta de dos disparos en la cabeza.
Tras la detención de los miembros del comando en abril de 1989, Ibáñez huyó a Francia y, tras recibir de la banda terrorista documentación falsa, viajó a Uruguay, país en el que residió hasta que fue extraditado.
Los magistrados han optado por condenar a Ibáñez Oteiza con la mayor que se puede imponer por un delito de asesinato al tener en cuenta la gravedad de los hechos -homicidio alevoso- así como su "frialdad de ánimo y total desprecio por la vida humana".
Además de los 27 años de cárcel, el tribunal ha condenado a Ibáñez Oteiza a indemnizar a los herederos de la víctima con 120.000 euros.
(SERVIMEDIA)
13 Mayo 2009
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