Aguirre fue el centro de atención a su llegada tras la crisis abierta a cuenta del futuro presidente de Caja Madrid y la única dirigente popular en hacer declaraciones ante los periodistas, si bien dejó claro que de su boca no iba a salir "ni una crítica" hacia la dirección nacional que encabeza Mariano Rajoy.

La presidenta madrileña se sentó en primera fila en la inauguración del cónclave junto a los principales dirigentes nacionales del partido. No obstante, ella estaba en un extremo junto a la vicesecretaria Ana Mato y el riojano Pedro Sanz, mientras que en la otra esquina quedaba el alcalde Alberto Ruiz-Gallardón, flanqueado por la portavoz parlamentaria Soraya Sáenz de Santamaría. Su escudero Manuel Cobo, suspendido de militancia, no vino a Barcelona.

Aguirre apareció con una amplísima delegación del PP madrileño en la que destacaban sus dos hombres fuertes en el gobierno y en el partido: el vicepresidente primero de la Comunidad, Ignacio González, y el secretario general del PP de Madrid, Francisco Granados, también consejero de Presidencia, Justicia e Interior.

Lo cierto es que Aguirre se desplazó a Barcelona con el equipo de gobierno al completo. Además de González y Granados, acudieron la consejera de Educación, Lucía Figar; el consejero de Sanidad, Juan José Güemes; la consejera de Familia, Engracia Hidalgo; la consejera de Empleo y Mujer, Paloma Adrados; el consejero de Inmigración, Javier Fernández Lasquetty; el consejero de Transportes, José Ignacio Echeverría Echániz; la consejera de Vivienda, Anabel Mariño; y el consejero de Economía, Antonio Beteta.

EL DOMINGO DARÁN PLANTÓN A RAJOY

Por difícil que parezca, no faltó ni uno solo de los consejeros del gobierno de Aguirre, aunque fuentes del PP de Madrid aseguraron a Servimedia que la inmensa mayoría de ellos regresan a la capital esta misma noche y por lo tanto no estarán ni en la jornada del sábado ni en la clausura del domingo, en la que tomará la palabra Mariano Rajoy.

Si se consuma el plan de los populares madrileños, el equipo de Aguirre volverá a dar plantón al presidente nacional el domingo de manera parecida a lo que hizo la propia presidenta al ausentarse la semana pasada en el Comité Ejecutivo Nacional convocado por Rajoy. De hecho, la propia Aguirre sólo tiene previsto quedarse hasta el sábado en la convención nacional y el domingo no estará para escuchar a Rajoy.

En la inauguración de este viernes, donde la protagonista era la secretaria general y ex consejera madrileña María Dolores de Cospedal, estuvieron también casi todos los miembros del Comité de Dirección del PP de Madrid, incluida la presidenta del Comité de Derechos y Garantías, Cristina Cifuentes, que propuso la sanción a Manuel Cobo por su entrevista del diario "El País".

Además, estuvo presente el portavoz del PP en la Asamblea de Madrid, David Pérez; el alcalde de Alcalá de Henares, Bartolomé González; el alcalde de Móstoles, Esteban Parro; el alcalde de Villanueva de la Cañada, Luis Partida; más de una veintena de diputados autonómicos en la Asamblea y varios miembros del equipo personal de Aguirre, como Borja Sarasola.

En cambio, la gran ausencia de la inauguración fue el presidente del PP de la Comunidad Valenciana, Francisco Camps. Ni él ni los principales dirigentes de esta formación estuvieron en la primera jornada de la convención nacional aunque se espera que a lo largo del fin de semana acudan a las mesas redondas y los foros de discusión convocados para recabar ideas que conformen el proyecto alternativo de Mariano Rajoy al Gobierno de Zapatero.