Asimismo, la organización recuerda que las comidas copiosas, especialmente si van acompañadas de alcohol, aumentarán el riesgo de sufrir problemas asociados con las altas temperaturas.

El menú debe incluir alimentos ligeros, sobre todo, fruta y verdura, además de pescado, pasta y legumbres, ya que el objetivo es aportar nutrientes fáciles de digerir por nuestro organismo, y beber como mínimo dos litros de agua diarios.

Para apoyar una correcta hidratación, es importante elegir alimentos con alto contenido en agua, tanto en fruta como en el menú principal. Las sopas frías como el gazpacho, además de aportarnos la verdura necesaria, contribuyen a cubrir las necesidades de agua de nuestro organismo.

Asimismo, con las altas temperaturas recomienda poner especial atención en la hidratación de niños y personas mayores porque tienen menor sensación de sed y poner cuidado en el proceso de conservación y preparación de los alimentos, ya que pueden favorecer el crecimiento de microorganismos.