En una nota de prensa, Automovilistas Europeos indicó que, con independencia de que las autoridades de Tráfico españolas puedan acreditar la correcta tramitación de todos los expedientes sancionadores que han dado lugar al inicio de la pérdida de vigencia del permiso para conducir del que es titular, dicho trámite no supone la pérdida del derecho a conducir en ninguno de los dos países en tanto no se dicte la correspondiente resolución.

"Tal y como está diseñado el permiso por puntos en España, el hecho de que una persona haya agotado su saldo de puntos no conlleva automáticamente la pérdida de su derecho a conducir, situación a la que sólo se llega después de un procedimiento en el que se declare la pérdida de vigencia del permiso de conducir y se le notifique de forma fehaciente al interesado", explicó.

En el caso de Carromero, la asociación señaló que no consta en las informaciones periodísticas que por parte de las autoridades de Tráfico españolas se hubiera dictado la correspondiente resolución ejecutiva y, en consecuencia, que estuviera privado de su derecho a conducir vehículos a motor en España.

"Por tanto", insistió, "no puede en modo alguno cuestionarse el derecho a conducir del señor Carromero en España, ni tampoco en Cuba, conforme establece el Art. 275 de la Ley nº 109, del Código de la Seguridad Vial, aprobado por la Asamblea Nacional del Poder Popular de Cuba, el 1/8/2010".