El objetivo de este programa es fomentar la aparición de vocaciones empresariales entre las mujeres. Para ello, aporta atención personalizada, con formación selectiva y de corta duración.

Se han impartido 48 cursos de una duración media de 20 horas, a los que acudieron 813 mujeres. Las participantes se benefician además de una asistencia técnica poco convencional, basada en servicios colectivos de autodiagnóstico.

También se incentiva la creación de reds de cooperación e intercambio de conocimientos entre emprendedoras. El perfil medio de la aspirante a empresaria es una mujer de más de 25 años, con buena formación académica (más de la mitad con estudios universitarios o de formación profesional) y que lleva un año parada.