Por contra, el estudio refleja que siete de cada diez gallegos sí denunciarían en caso de conocer alguna situación de malos tratos.

Las personas más jóvenes y quienes residen en las grandes ciudades son las más predispuestas a la hora de denunciar los casos de violencia de género: un 82,7% de las personas de entre 18 y 29 años estarían despuestas a denunciar frente al 71,6% en el caso de los mayores de 65 años, y un 80,5% de habitantes de ciudades de más de 50 mil habitantes frente al 73% de los pueblos con menos de 10 mil.

En el caso de personas que conocen casos concretos de violencia de género, un 77,4% de los encuestados declara que no denunció estos hechos, mientras que un 22,4% reconoció haberlo hecho. Entre quienes denunciaron, un 26,5% eran hombres y un 20,1% mujeres.