Tras el regreso de los talibanes al poder en Afganistán, el Gobierno de Pedro Sánchez puso en marcha una compleja operación de evacuación de españoles y colaboradores afganos de España, que completó el 27 de agosto, días antes de que Estados Unidos finalizara su retirada y el aeropuerto de Kabul quedara bajo control talibán. Gracias a esa operación se puso a salvo a 2.206 personas.

Lejos de detener en ese punto la misión de rescate, ​el ministro de Asuntos Exteriores, UE y Cooperación viajó a Pakistán el pasado 10 de septiembre con el objetivo de buscar "vías seguras" para continuar con la evacuación de colaboradores afganos de España.​

Durante su viaje a Islamabad, el ministro se reunió con el primer ministro, Imran Khan, su homólogo paquistaní, Shah Mahmud Qureshi, así como con el jefe del Estado Mayor. Albares señaló entonces que Pakistán, es uno de los "principales actores regionales" en esta crisis, por la relación que existe entre sus servicios de Inteligencia y los talibanes.

Gracias a estas gestiones, el 11 y 12 de octubre aterrizaron en la Base Aérea de Torrejón de Ardoz dos aviones procedentes de Pakistán, con un total de 240 colaboradores afganos y sus familias. Ahora, Shah Mahmud Qureshi devuelve la visita a Albares, con el que almorzará en el Palacio de Viana, y con el que podrá buscar nuevas vías seguras para proseguir con los vuelos de evacuación de más personas que trabajaron para España en el país asiático.