Según informó el Instituto Armado, como integrantes de esta organización delictiva han sido detenidas siete personas, que cuentan con numerosos antecedentes policiales y penales. A los arrestados se les imputan 12 delitos de robo con fuerza, así como tenencia ilícita de armas e integración en grupo criminal.

Los detenidos son P.B.G., A.C.F., J.L.B.V., O.B.V., M.B.G., G.M.P. y E.A.G., todos ellos españoles, salvo el último que es finlandés. Tienen edades comprendidas entre los 20 y los 33 años de edad y cuentan con numerosos antecedentes policiales y penales por hechos relacionados contra el patrimonio.

En los siete registros domiciliarios realizados en Madrid, Leganés y Fuenlabrada, se intervino gran cantidad de efectos que implicaban directamente a los sospechosos en los asaltos. Así, se encontraron efectos de cosmética, relojes, zapatillas y prendas de vestir.

En los registros también se localizaron herramientas que los detenidos utilizaban en sus robos, entre las que destacan dos radiales; un hacha; un pico; y una maleta con bombonas combinadas de oxígeno y acetileno enganchadas a un soplete, que utilizaban para la apertura de las cajas fuertes.

VIGILANCIA PARA LOS ASALTOS

La banda perpetró robos con fuerza en relojerías, joyerías, una pastelería, perfumerías, zapaterías, peluquerías y varias empresas de la Comunidad de Madrid.

La investigación de la Guardia Civil se inició el pasado mes de enero, tras la comisión de un alunizaje con un coche robado en un taller de la localidad madrileña de Pinto. Los asaltantes lograron llevarse un vehículo de alta gama que estaba estacionado en el interior de este establecimiento.

Tras las primeras investigaciones los agentes lograron identificar a los integrantes del citado grupo, el cual estaba perfectamente organizado y jerarquizado, de manera que cada integrante su papel claramente identificado antes de perpetrar los robos.

Tras realizar durante varios días una vigilancia del establecimiento que iban a asaltar, la banda se desplazaba hasta el lugar del golpe. Tras anular con inhibidores los sistemas de alarma, accedían al interior de los locales y forzaban las cajas fuertes utilizando radiales y sopletes con oxígeno y acetileno. Mientras tanto, otros miembros del grupo realizaban funciones de vigilancia en las inmediaciones del lugar.

Los ahora detenidos realizaron numerosos viajes a Sevilla y Barcelona, y mantuvieron contactos con otros grupos delincuenciales de esas provincias, especialmente en la zona de las “tres mil viviendas” de Sevilla.