Presentada por sus impulsores en Bruselas, la petición criticaba además el impacto ambiental en zonas protegidas y de cría de aves, ya que “algunas de ellas han sufrido accidentes a causa de los aviones”, indicaban.

Fuentes del Parlamento explicaron a Servimedia que la petición contaba con un informe en contra de la Comisión Europea, que consideró que “el impacto que estas rutas aéreas han tenido sobre la zona de aves protegidas no es suficientemente relevante como para emprender acciones contra las autoridades locales”, pese a lo cual el Comité de Peticiones estimó que la queja merecía una mayor investigación y se comprometió a debatirla de nuevo en los próximos meses.

Con todo, desde el Parlamento Europeo afirman que “esta situación no es habitual”, y apuntan que con un informe contrario lo más normal es que la próxima vez esta queja sea desestimada.