Los senadores Iñaki Anasagasti y Alberto Unamunzaga preguntaron por este tema a Morenés en la sesión de control al Gobierno, con un enunciado muy parecido.

El parlamentario del PNV preguntó si no le parecía una decisión "desafortunada", y el de Amaiur si no la encontraba "reprobable, o cuando menos lamentable", haber escogido para la marcha la efeméride del día en que las tropas franquistas entraron en el municipio a sangre y fuego en 1937, dejando 2.000 muertos.

A Anasagasti, Morenés le contestó que llamar maniobras militares a un paso de 30 soldados, dentro de una travesía que había pasado por varios pueblos y que se realiza de forma habitual, que cruzó Elgeta a primera hora de la mañana para no causar molestias.

Sea como fuere, observó que "el Ejército de Tierra está en su derecho y en su obligación de hacer ejercicios como, donde y cuando considere necesario" para adiestrarse de cara al cumplimiento de las misiones que le asigna la Constitución.

El senador del PNV aseguró que no identificaba a Morenés, a quien describió como "una persona sensible" y "un vasco", en la respuesta que le había dado, que interpretó como un “tengo el poder y lo ejerzo”.

Quiso pensar que el ministro se había encontrado con un hecho consumado por un error de los programadores del ejercicio y reprochó que no se hubiera avisado de éste a los ayuntamientos de la zona. "Me defrauda con esa respuesta", lamentó.

"VASCO Y ESPAÑOL"

Morenés le contestó que para "hundir sus raíces en el País Vasco igual que usted, y por eso también en España" (un silogismo cuya formulación le recriminó Anasagasti con gestos desde su escaño) no necesitaba otra ejecutoria que la personal.

Además, rechazó las "connotaciones" con las que "exagera lo que ocurrió allí" y le instó a "abandonar la grandililocuencia" ante una marcha habitual que se hizo "poniendo exquisito cuidado" en no molestar a la poblacion.

Por su parte, Unamunzaga antepuso a su pregunta el relato de la masacre de su abuelo y todos sus hijos menos el padre del senador a manos de las tropas franquistas, después de ordenarles que salieran del sótano del caserío.

Por eso, considera que la marcha coincidiendo con el aniversario "ha supuesto volver a abrir una herida innecesariamente", y que era imposible no reparar en la efeméride porque se habían anunciado actos en el pueblo para conmemorarla.

Morenés insistió en negar la caracterización como "maniobra" de la marcha y, aunque reconoció que la historia de Unamunzaga era "terrible", la puso, junto a todas las demás de esta índole ocurridas en el País Vasco, en el contexto de "la catástrofe que fue el enfrentamiento civil" en España, que a su juicio "nada tiene que ver con un ejercicio para preparación de fondo" del Ejército.

Además, incidió, dada la tumultuosa historia de Elgeta, "sería imposile encontrar un solo día en que no se haya combatido"en el municipio alguna vez en los últimos 200 años.