Así lo aseguró en Pamplona durante la presentación, junto al ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, y la presidenta de la Comunidad Foral de Navarra, María Chivite, de las seis nuevas unidades didácticas del proyecto ‘Memoria y Prevención del Terrorismo’, un material pedagógico que se utilizará en distintas asignaturas de educación Secundaria.

Según puntualizó la ministra, estas unidades didácticas introducen en la escuela la “crudeza”, pero también “la honestidad y el compromiso necesarios para distinguir el bien del mal y evitar que haya nuevas generaciones que tengan la misma tentación de apoyar la violencia sectaria”.

“Sabemos que estos temas no son cuestiones fáciles de abordar, que suscitarán debates, que tocarán emociones quizás ocultas, pero confiamos en que el profesorado pueda apoyarse en estos materiales e incluso mejorarlos con su experiencia práctica”, abundó, para advertir de que “en lo que todos podemos coincidir es en que hay que hablar de ello, también en las aulas”.

A este respecto, puntualizó que el objetivo es “poner luz en esas sombras, desterrar el miedo, el silencio y el olvido, promover la defensa de las ideas mediante el diálogo, no con la violencia”. “Con este objetivo hemos elaborado estos materiales didácticos, para aportar conocimiento de lo ocurrido, sin olvidar la voz de las víctimas”, resolvió.

MEMORIA Y PREVENCIÓN

A continuación, el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, destacó la importancia de los dos conceptos que dan nombre al proyecto, la memoria y la prevención que, a su entender, "definen con fidelidad la política de los ministerios concernidos en materia de terrorismo y de ayuda y soporte a sus víctimas”. “Queremos para España una democracia plena y ninguna democracia digna de tal nombre lo será si no ampara y reconoce a quienes, de manera injusta, han sido atacados, perseguidos y amenazados y que siguen siendo un referente para todos nosotros”, espetó.

Por su parte, la presidenta del Gobierno de Navarra, María Chivite, consideró “imprescindible para construir una sociedad plenamente democrática” que el terrorismo, “la historia, lo que es, lo que implica, lo que fue, esté en las aulas”. “La educación tiene un papel nuclear en esos valores y principios porque es mucho más que formación”, agregó, para justificar así el “compromiso” de su Gobierno para introducir en el currículum esta materia.

El proyecto ‘Memoria y Prevención del Terrorismo’ es una iniciativa conjunta de los ministerios del Interior y de Educación y Formación Profesional, que se inició hace tres años con el objetivo de elaborar materiales didácticos que desarrollasen los contenidos incluidos en el currículo básico de la Educación Secundaria Obligatoria y de Bachillerato referentes a la historia del terrorismo y al fomento de los valores de rechazo a la violencia terrorista y de respeto y consideración hacia las víctimas del terrorismo.

Las unidades están disponibles en castellano, euskera, catalán y gallego y la primera unidad se presentó en noviembre de 2018 y está destinada a alumnos de Geografía e Historia de 4º de la ESO. A esta se suman las seis nuevas unidades presentadas este lunes y que incluyen asignaturas como Historia, Valores Éticos, Filosofía y Psicología.

Cada unidad se divide en varias sesiones e incorpora actividades a realizar por el alumno y todas ellas invitan a la participación activa del estudiante y a fomentar su reflexión, según explicó el departamento de Alegría, que recordó que en el desarrollo de dicho proyecto han colaborado el Centro Memorial de las Víctimas del Terrorismo y la Fundación Víctimas del Terrorismo, así como el resto de fundaciones y asociaciones que agrupan a los integrantes del colectivo.