Tribunales

El juez afirma que Rafael Amargo lideraba un grupo que traficaba con droga y vendía metanfetamina desde su casa

MADRID
SERVIMEDIA

El juez que instruye el caso de Rafael Amargo ha cerrado la instrucción de la causa y pone a un paso del banquillo al bailarín como cabecilla de un grupo que traficaba con droga y que vendía metanfetamina desde el piso que compartía con su mujer, utilizando a correos que llevaban la droga a los compradores.

El titular del Juzgado de Instrucción número 48 de Madrid, Juan Ramón Reig, ha dictado un auto por el que transforma las diligencias en procedimiento abreviado. Según el escrito, Amargo, su mujer Luciana, su socio y el productor Eduardo de los Santos estarían acusado de un presunto delito contra la salud pública y otro de pertenencia a grupo criminal

El magistrado Juan Ramón Reig entiende que Amargo, su mujer, el productor y otro socio llamado Miguel Ángel B.A. podrían incurrir en un delito contra la salud pública y otro de pertenencia a grupo criminal, y da traslado al Ministerio Público y a las acusaciones particulares para que formulen escrito de acusación, solicitando la apertura de juicio o bien el sobreseimiento de la causa. Contra este auto cabe recurso.

Aclara el magistrado que estas partes podrán reclamar "excepcionalmente" la práctica de diligencias complementarias "que consideren imprescindibles para formular la acusación". Según el magistrado, los cuatro investigados "actuaban de común acuerdo en la recepción, preparación y distribución de sustancias estupefacientes, en especial metanfetamina, a terceros".

El auto explica el ‘modus operandi’ de del grupo que, según su relato, tenía como base de operaciones el domicilio del matrimonio Amargo. Así, los potenciales compradores llamaban al portero automático de la vivienda o contactaban con ellos por teléfono para hacer el pedido.

"Tras breves minutos en el domicilio, salían del inmueble portando la sustancia adquirida, que por la cantidad intervenida en los supuestos en que fueron interceptados, excedía de la que puede considerarse para autoconsumo", dice el juez. Además, utilizaban ‘mulas’ para enviar los estupefacientes a domicilio a donde los transportes llegaban caminando o a borde de un Uber contratado por el comprador.

Los investigados participaban en todo este proceso de acuerdo al reparto de funciones que tenían asignado. El magistrado sitúa a Rafael Amargo en el papel de cabecilla de la trama y comprador de contingentes de “mediana envergadura” de la droga. De Santos era el socio capitalista que costeaba la compra de los estupefacientes.

La Policía aportó al juez los datos correspondientes a la droga incautada en los distintos registros, principalmente metanfetamina, ketamina, MDMA y GBL, los datos de las llamadas telefónicas entre vendedores y compradores. Amargo fue detenido el 1 de diciembre de 2020 al salir de un ensayo y posteriormente puesto en libertad.

(SERVIMEDIA)
30 Nov 2021
SGR/clc