Según informó este jueves la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), los ingresos se redujeron un 20,7%, hasta los 7.445,8 millones. De la cuantía total, 3.369,2 millones (-10,6%) proceden del negocio nacional y 4.076,6 del internacional (-27,4%).

Por su parte, el resultado bruto de explotación (Ebitda) se situó en 818,5 millones de euros, un 34,3% menos que un año antes.

Desde Ferrovial explicaron que la cifra de beneficio “es producto de la plusvalía y puesta en valor de la rotación de activos, de la internacionalización de la compañía y la buena marcha operativa del conjunto de los negocios”.

Cabe destacar la desinversión del 5,88% del gestor aeroportuario británico BAA, que generó una plusvalía de 847 millones de euros, y las ventas de Swissport y de la autopista M-45 (representaron 195 y 27 millones de euros, respectivamente).

Por ramas de actividad, los ingresos en construcción representaron 4.243 millones, tras caer un 4,5%, mientras que en servicios crecieron un 9,4%, hasta los 2.280 millones.

En el caso de autopistas las ventas representaron 389,7 millones de euros, y en aeropuertos fueron de 10,4 millones de euros.

En cuanto a la cartera, ésta alcanzó los 22.422 millones de euros, manteniéndose en máximos históricos. En concreto, la división de servicios cuenta con 12.425 millones de euros, tras crecer un 0,4% en el último año, mientras que en construcción se redujo un 1,8%, hasta los 9.997 millones.

Por último, la deuda neta del grupo que preside Rafael del Pino se redujo de 19.788,7 millones de euros en 2010 a 5.170,9 millones a finales de 2011.