El titular de Interior descartó la posibilidad de iniciar un proceso de ilegalización de Bildu y Amaiur, por "inteligencia, prudencia y discreción" y poniendo la vista en el mantenimiento de la "unidad de los demócratas".

Fernández Díaz respondía así a una interpelación de UPyD que pretendía convencer al Gobierno de usar "todos los mecanismos del Estado de derechos a su alcance" para evitar que las siglas vinculadas a la izquierda abertzale, que Díez considera miembros de ETA, puedan destruir las instituciones democráticas desde dentro.

Su intención, con esta iniciativa parlamentaria, es conseguir que el Ejecutivo use todos los instrumentos a su alcance para "proteger el Estado de derecho", algo que ahora no está haciendo y que deja "indefensa a la sociedad".

Rosa Díez insistió en que "hay pruebas" que pueden demostrar la vinculación de Bildu y Amaiur con ETA, pese a que el Tribunal Constitucional decretó el pasado mes de mayo la legalidad de Bildu.

"No confundamos lo que nos repugna políticamente con lo que es posible jurídicamente", le respondió el ministro, que se reveló molesto por la presentación "legítima" de una iniciativa parlamentaria que, a su entender, contradice el compromiso de apoyo en materia antiterrorista que le dio UPyD en su primera comparecencia en el Congreso.

"Si usted entiende que respaldar la estrategia y la táctica del Gobierno" en lo que se refiere a la lucha contra ETA "es igual que presentar una interpelación así sin hablar siquiera antes con nosotros, sencillamente estamos hablando en idiomas diferentes".

El Gobierno, garantizó Fernández Díaz, "va a seguir actuando implacablemente para que ETA deje de existir", porque "no quiere vivir contra ETA, quiere vivir sin ETA. Y ese tránsito hay que gestionarlo con inteligencia, con prudencia, con discreción y manteniendo la unidad de los demócratas".

El ministro recordó que el Tribunal Constitucional tiene que dictaminar aún sobre Sortu y advirtió de que "si no tenemos elementos probatorios suficientes, haríamos un mal favor a la democracia" propiciando una sentencia que se convertiría en "una victoria para los que usted y yo queremos combatir".

Rosa Díez aseguró que eso a lo que el ministro "llama prudencia, yo lo llamo cobardía", y quien "no se atreve a ganar, perderá siempre".

"Nunca creí que llegara tan lejos, que llegara a acusarnos de cobardía. Quizá usted confunde el oportunismo político con la salvaguarda del Estado de Derecho", la reprendió Fernández Díaz.

El ministro volvió a hacer un llamamiento para actuar con "inteligencia" y reconoció que los compases finales de la banda terrorista ETA no son un problema exclusivamente policial. "Tiene una dimensión política" que implica saber convertir una "derrota policial en una victoria de los demócratas. En ese camino, espero y deseo que usted nos acompañe", concluyó.