Bajo el lema "En defensa de nuestra agricultura, no al acuerdo con Marruecos", los productores de las distintas comunidades autónomas iniciaron así una concentración que tienen previsto prolongar hasta el próximo jueves.

El responsable del sector de frutas y hortalizas de COAG, Andrés Góngora, manifestó que la renovación del acuerdo acarreará grandes pérdidas para este sector económico, del que podrían verse afectados hasta 450.000 puestos de trabajo directos a largo plazo. En concreto, algunas de las zonas de producción más afectadas serían Andalucía, Murcia y Valencia.

A juicio de Góngora, es "muy difícil" competir con las producciones de las grandes industrias que se han instalado en Marruecos, puesto que la mano de obra en ese país "roza prácticamente la esclavitud". "Una jornada de sol a sol se paga en Marruecos a 4,8 euros, mientras que en España varía entre los 50 y los 60 euros, más los seguros sociales", puntualizó.

Uno de los productos más perjudicados por este acuerdo es, según los agricultores, el tomate, cuyo calendario de producción coincide con el de Marruecos. En este sentido, Góngora explicó que producir un kilo de tomates en Andalucía cuesta 60 céntimos, mientras que el tomate marroquí cuesta 46 céntimos.

Otros productos como melones, pimientos, judías, sandías, limones, naranjas, melocotones, alcachofas y aceite de oliva verían liberalizado su contingente de entrada en España, pudiendo venderse la cantidad y al precio que Marruecos decida establecer.

Según los datos facilitados por COAG, el sector de frutas y hortalizas genera en España la mitad del empleo agrario, elevando el valor de las exportaciones hasta los 8.600 millones de euros la campaña pasada.

Los agricultores denuncian, además, que Marruecos no cumple la misma normativa de seguridad alimentaria. "Marruecos es el vertedero de todos los productos fitosanitarios y materiales activos que están prohibidos en la UE", como algunos desinfectantes de suelo para las explotaciones hortofructícolas, apuntó Góngora.