Lo hizo en rueda de prensa en la Cámara poco después de que se confirmara el preacuerdo entre ERC y En Comú Podem para que esta segunda formación retire su enmienda a la totalidad del proyecto de Presupuestos del Ejecutivo de Pere Aragonès, y se abstenga en la votación de las de otros grupos. La ayuda de los Comunes sustituye a la CUP, que anunció su voto en contra pese a haber estado apoyando al Gobierno de ERC y JxCat, y permite que el proyecto de cuentas se siga tramitando.

Vidal precisó que este preacuerdo incluye pactos en movilidad ferroviaria, para duplicar un plan de industria y también en vivienda, y que ahora los Comunes se dan de plazo para seguir negociando hasta el 23 de diciembre, fecha en la que está prevista la votación definitiva en el Parlamento catalán.

Cuando se le preguntó si ERC debería corresponder al gesto de los Comunes apoyando los Presupuestos Generales del Estado, la portavoz parlamentaria dijo que no le “gusta hablar de cambio de cromos”, lo cual “es una mala lectura, un mal signo”, pero dejó caer que sería “importante que el mismo ejercicio de responsabilidad que estamos haciendo lo haga ERC aquí en el Congreso”. En este sentido, subrayó que el portavoz de ERC en el Ayuntamiento de Barcelona ya ha anunciado que desbloquea también la aprobación del presupuesto municipal.

Además, Vidal quiso subrayar que JxCat es miembro del Gobierno (catalán) pero se ha quedado fuera de los dos grandes acuerdos”, la mesa de diálogo y los Presupuestos autonómicos, y juzgó que “eso es muy preocupante” y “anuncia una crisis”. En esta línea, recordó que los Comunes siempre propusieron a ERC un Gobierno de izquierdas y no con los posconvergentes, y se reafirmó en que “el eje izquierda-derecha en el Parlamento catalán está más vivo que nunca”.