Según informó Funcas este miércoles, el recorte en la previsión de los panelistas respecto a la publicada en septiembre se produce después del que aplicó el Instituto Nacional de Estadística (INE) sobre el PIB del segundo trimestre, desde el 2,8% avanzado hasta el 1,1% finalmente confirmado, y de estimar un aumento provisional del 2% en el tercer trimestre. Con ello, Funcas destacó que se aleja la perspectiva de que España lidere el crecimiento europeo este año.

Para 2022, los panelistas de Funcas también ha empeorado sus perspectivas en cuatro décimas, al pasar de un crecimiento del PIB del 6,1% al 5,7%, bajo el supuesto de que los elevados precios energéticos y de las materias primas se mantendrán hasta la primavera y descenderán posteriormente.

La mayoría de panelistas estima que el próximo año se ejecutarán unos 20.000 millones de euros de los fondos europeos.

En cuanto a la inflación, los panelistas han vuelto a revisar al alza sus perspectivas, para situar la tasa media anual en el 2,9% y el 2,4% el próximo, cinco y ocho décimas más, respectivamente, que en septiembre.

La estimación para la inflación subyacente -la que no tiene en cuenta los precios energéticos ni los alimentos no elaborados- también sube, al 0,8% para 2021 y al 1,4% para 2022.

Mientras, la tasa interanual de inflación prevista para diciembre de este año es del 5,2% y del 1,1% en diciembre de 2022.

Respecto al empleo, los panelistas de Funcas sitúan la tasa media anual de paro en el 15,2% en 2021, lo que supone cuatro décimas menos que en el panel de septiembre, y para 2022 la esperan en el 14,4%, tres décimas menos.

Para el déficit público, la previsión es que se sitúe en el 7,9% del PIB este año, dos décimas menos que en el panel anterior. Esta previsión es mejor que la del propio Gobierno, que en el Plan Presupuestario de septiembre la situaba en el 8,4%.

Para 2022, la previsión de consenso sí se sitúa por encima de la del Gobierno, 5,7%, frente a 5%, y se mantiene invariable respecto al panel anterior.

La mayoría de analistas opina que el carácter expansivo de la política monetaria y de la fiscal debería prolongarse en los próximos meses y no esperan variaciones apreciables en los tipos de interés de referencia del Banco Central Europeo (BCE) hasta finales de 2022. Sin embargo, los tipos de interés de mercado seguirán al alza, en consonancia con las expectativas de inflación.