Según informa en un comunicado, ANDA realizó varias alegaciones al antiguo Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino contra esta medida, que daría luz verde a la cacería de este tipo de animales, como ya ocurre con los jabalíes u otras especies salvajes.

La asociación entiende la necesidad del proyecto como herramienta básica para el control de especies potencialmente invasoras y garantizar la riqueza y sostenibilidad de la biodiversidad en España, pero no está "en absoluto de acuerdo" con la inclusión de los animales de compañía (perros y gatos).

En primer lugar, ANDA recalca que estos animales, aun sueltos, no pueden catalogarse como "especies exóticas invasoras", objeto del presente borrador, además de que la condición de "asilvestrado" es imposible de determinar.

Según explica Alberto Díez, portavoz de la asociación, históricamente, cuando se ha solicitado una Ley Nacional de Protección Animal o una política para la gestión de perros sueltos o abandonados, "tanto el antiguo Ministerio de Agricultura como ahora el de Medio Ambiente se han inhibido a la hora de legislar en asuntos relacionados con los animales de compañía".

Díez añadió que siempre se ha aducido que esta competencia recae en las comunidades autónomas, por lo que se pregunta "cómo es posible que ahora, de repente, asuma esa competencia".

"El ciudadano y las ONG podrían pensar que a la hora de legislar sobre protección de animales de compañía el Ministerio no tiene, o no quiere tener, las competencias, pero cuando se trata de dar cobertura legal a las 'batidas de perros' organizadas como medio de control de poblaciones caninas sueltas, entonces sí, es competente", subrayó.