El fiscal encargado del caso, Jesús Carballo, pedirá penas de tres años de cárcel y multas de hasta 1.200 euros para los acusados al atribuirles delitos de coacciones terroristas y varias faltas de lesiones y agresiones.

Los procesados que se sentarán en el banquillo de los acusados son Ángel Benito, Gaizka Amorrortu, Alfredo Remírez, Asier Barruetabeña, Beñat Mendiguren, Aitor Basterra, Iker Roiz, Oihana Gomara, Carmelo Serrano, Saioa Ugarriza, Jon Ander Altube, Eulalia Aramendi, Aitor Goicoechea, Kepa Garrote, Urtzi Goitia, Miguel Ángel Mate, Jesús María Gómez, Aitor de la Torre y Oier Amorrortu.

El juicio, que arrancará mañana a las 10.30, está previsto que se extienda hasta el miércoles.

ILEGALIZACIÓN DE BATASUNA

Los hechos tuvieron lugar el 14 de junio de 2003, durante el pleno de constitución del Ayuntamiento de Llodio. El fiscal Caballo asegura en su escrito de acusación que los simpatizantes de Batasuna irrumpieron en el salón de plenos con la intención “de impedir la celebración del acto mediante el amedrentamiento y la coacción verbal y física sobre los candidatos electos”.

El Tribunal Supremo había declarado ilegal a Batasuna ese mismo año y había impedido que la nueva marca electoral de la izquierda abertzale concurriese a las elecciones municipales celebradas en mayo.

Los acusados “no dudaron en escupir, insultar a grandes gritos y amenazar” a los concejales electos y llegaron a ocupar los asientos de los ediles. “Tanto los concejales electos como sus compañeros del Partido Popular, debieron abandonar el salón, con la protección de sus escoltas, gracias a los cuales, se evitaron las agresiones más graves”, señala el escrito del representante del Ministerio Público.

Los concejales del PP agredidos eran Santiago Abascal Conde (también diputado nacional) Rosa María Torres y María Monserrat Canive. También fueron víctimas de las coacciones el concejal del PP de Amurrio (Álava) Esaú Martín y el diputado del Parlamento Vasco Carlos Urquijo, quienes habían acudido al acto para apoyar sus compañeros de partido.

ESCUPITAJOS Y AMENAZAS

Uno de los más perjudicados fue Santiago Abascal. El escrito del fiscal indica que el acusado Miguel Ángel Mate trató de agredir al concejal y diputado, mientras que Aitor Goicoechea y Oier Amorrortu le propinaron “patadas y puñetazos”.

Amorrortu volvió a agredir a Abascal a la salida del consistorio, escupiéndole y espetándole un “pim, pam, pum”, que para el fiscal Carballo representa una “clara amenaza terrorista” y se enmarcó en el “clima de terror ejercido sobre los concejales en el País Vasco”.

Tres de los miembros del PP resultaron lesionados debido a las agresiones, al igual que un miembro del público que intentó defenderles. El pleno tuvo que suspenderse debido a los “graves incidentes”.

Además de la pena de prisión y de las multas, el fiscal Carballo solicita que se prohíba a los acusados acudir al Salón de Plenos del Ayuntamiento de Llodio por un plazo de cinco años.