El juez De Castro tomó esta decisión después de celebrar una vista hoy durante más de dos horas en la que estuvo presente el médico autor de los nuevos informes, que fueron solicitados ayer por el fiscal de Menores de la Audiencia Nacional Ignacio Gordillo.

El doctor aseguró que las nuevas pruebas, consistentes en una ortopantomografía –una radiografía panorámica de los dientes-, señalan con un 97 por ciento de probabilidad que Willy es mayor de edad.

“Ha quedado suficientemente acreditado que Abdu Willy es mayor de 18 años”, señala De Castro en su auto, en el que añade que “con la sola prueba dental ya quedaría acreditada la probabilidad de la mayoría de edad en margen superior al 97 por ciento”.

A pesar de considerarle mayor de edad, se da la paradójica circunstancia de que el propio juez De Castro ordena que “la custodia y traslado” de Willy a la Audiencia Nacional sea llevada a cabo por el Grupo de Menores de la Policía Nacional.

De esta forma, el presunto pirata, ahora considerado mayor de edad, pasará esta tarde a disposición de la Audiencia Nacional por la vía penal ordinaria. Fuentes jurídicas señalaron que Willy no comparecerá ante Pedraz, sino ante el juez Fernando Andreu, que se encuentra de guardia y que será el encargado de decidir si ordena su ingreso en una prisión de adultos.

Aun así, habrá que esperar a mañana para que Pedraz, el juez encargado del caso, analice las nuevas pruebas médicas y tome una decisión definitiva sobre el futuro del supuesto pirata acusado de participar en el secuestro del atunero vasco.

Las fuentes consultadas señalaron que Pedraz tiene previsto enviar todas las pruebas médicas realizadas hasta ahora –tanto las de la Audiencia Nacional como las solicitadas por la Fiscalía de Menores- al Instituto Toxicológico para que sean contrastadas y se emita un informe definitivo sobre la edad de Willy.

PRUEBAS CONTRADICTORIAS

Fue el propio Pedraz quien el pasado martes decidió dejar en libertad a Willy a la luz de las pruebas realizadas hasta entonces y de los informes efectuados por tres médicos forenses de la Audiencia Nacional.

Estos datos indicaban que el presunto pirata tenía entre 17 y 19 años, por lo que Pedraz, en virtud el principio “in dubio pro reo”, decidió considerar que era menor de edad, ordenó su salida de la prisión madrileña de Alcalá-Meco en la que estaba ingresado y remitió su caso a la Fiscalía de Menores de la Audiencia Nacional.

Desde entonces, el presunto pirata ha protagonizado una “peregrinación” por distintos órganos y centros de internamiento. El martes fue ingresado de forma preventiva en una casa de acogida, el miércoles fue ingresado en un centro de detención de menores y es muy probable que esta noche, a la espera de lo que decida mañana Pedraz, Willy duerma otra vez en una prisión de adultos.

Está acusado de un total de 36 delitos de detención ilegal -por los 36 tripulantes del atunero-, otro de robo con violencia, otro de asociación ilícita y un delito adicional de uso de armas, figuras que suman más de 200 años de cárcel.

Willy fue detenido junto al otro presunto pirata, Raageggesey Hassan Haji, el pasado 3 de octubre, un día después del secuestro del "Alakrana". Un helicóptero de la fragata "Canarias" dio alcance a la pequeña embarcación en la que los dos supuestos secuestradores del "Alakrana" intentaban alcanzar la costa de Somalia.