Salud mental

Expertos auguran que los casos de depresión, que se han disparado por la pandemia, tocarán techo en 2022

MADRID
SERVIMEDIA

El doctor Eduard Vieta, jefe de Servicio de Psiquiatría y Psicología del Hospital Clínic de Barcelona, catedrático de Psiquiatría en la Universidad de Barcelona y director Científico de Cibersam, auguró este viernes que las cifras de casos de depresión, que se han disparado durante la pandemia, “volverán a una cierta normalidad a lo largo del año que viene”, aunque no a niveles prepandémicos.

Así se expresó en el XIX Seminario Lundbeck ‘Covid19 & Depresión, la tormenta perfecta’, que se celebra en Sitges (Barcelona) en donde también alertó de que a pesar de esa nueva “supuesta normalidad” que pronosticó, los trastornos mentales seguirán aumentando, aunque "de forma lenta pero progresiva, algo que ya sucedía antes de la pandemia, y que tiene que ver con nuestra resiliencia y las expectativas derivadas del Estado de bienestar”.

De forma parecida se pronunció el doctor Lorenzo Armenteros, médico de familia en el Centro de Salud Islas Canarias, en Lugo, y miembro del Grupo de Trabajo de Salud Mental de la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (SEMG), quien consideró que las actuales cifras de salud mental en España, que apuntan a que un 20% de los españoles sufre trastorno mental "se irán estabilizando, pero va a ser un proceso lento, costoso y que nos va a exigir mucho esfuerzo. Además, tenemos un problema añadido: una atención primaria y hospitalaria cansada y debilitada para afrontar un reto como este”.

Para la doctora Rosa Molina, psiquiatra en el Hospital Clínico San Carlos de Madrid y presidenta de la Sección de Neurociencia Clínica de la Asociación Española de Neuropsiquiatría, el incremento de cuadros depresivos que se han producido tras la pandemia "es bastante palpable en muchas de las consultas de salud mental, aunque el aumento es más en lo que conocemos como trastornos adaptativos o depresiones reactivas”, y puso el acento en “otro dato llamativo y, a la vez, escalofriante, como es el aumento de los intentos de suicidio entre los más jóvenes y el incremento de las autolesiones”.

Precisamente, este colectivo y el de los mayores, son los que más han sufrido los efectos de la pandemia en su salud mental. “Los trastornos alimentarios han aumentado mucho entre los jóvenes, sobre todo, entre las chicas", destacó el doctor Armenteros, quien agregó que este trastorno ha pasado de una prevalencia del 4%, al 8%.

“Si la última Encuesta de Salud de 2017 establecía que los trastornos depresivos afectaban a casi el 7% de la población, ahora estamos cerca del 20%. Además, son prevalentes en los pacientes con Covid persistente", destacó el doctor Armenteros. El 86% de este tipo de pacientes tiene síntomas psicológicos o emocionales como la ‘niebla mental’, que les impide llevar una vida normal y afrontar con normalidad su vida cotidiana.

DEPRESIÓN

Pero hay que diferenciar que no es lo mismo tener síntomas depresivos que tener una depresión. En este sentido, el doctor Vieta explicó que "muchas personas han percibido malestar emocional, nerviosismo, y dificultades para conciliar el sueño durante el confinamiento, por ejemplo.

Sólo una proporción mucho más pequeña de ellos ha desarrollado un trastorno depresivo o ansioso que ha precisado tratamiento. Sin embargo, el hecho de que tanta gente haya mostrado sufrimiento emocional ha sido y es un caldo de cultivo para que aumenten estos trastornos, justo en un momento en que el sistema de salud está todavía tensionado por la atención a la pandemia. Eso nos va a obligar a fortalecer el sistema de salud con más profesionales de la psiquiatría, psicología clínica, enfermería de salud mental y trabajo social”.

Tanto el doctor Vieta como el doctor Armenteros coincidieron en denunciar la carencia de psicólogos clínicos en el SNS, lo que dificulta el acceso a una intervención de la psicoterapia. Vieta también demandó “más psiquiatras. Es necesario formar profesionales, recuperar a los que se fueron, reforzar la conexión entre salud comunitaria y atención primaria, desestigmatizar los trastornos mentales eliminando barreras a su integración social, invertir en prevención e investigación”, aseveró el doctor Vieta.

La doctora Molina concluyó que si algo se ha aprendido de la pandemia es: “No hay salud sin salud mental” mientras que el doctor Armenteros reivindicó el papel de la Atención Primaria que “tiene que ser fuerte” también a la hora de afrontar los problemas de la salud mental y que ahora está en crisis por falta de medios.

(SERVIMEDIA)
05 Nov 2021
MAN/gja