Estos médicos se encuentran en una situación de incertidumbre, ya que a partir del 1 de enero de 1995 ningún facultativo podrá trabajar sin su correspondiente título de especialidad, al que obligará la legislación que impondrá el libre mercado en la Unión Europea.

Según los sindicatos consultados, es "necesaria y urgente" la adopción de alternativas por parte de las autoridades a los tradicionales exámenes d Médicos Internos Residentes (MIR).

Las organizaciones sindicales que representan a este sector médico no descartan el inicio a corto plazo de movilizaciones para demandar a la Administración soluciones a la "inestabilidad laboral" que se derivará de la aplicación de ese plazo.

Pese a los aproximadamente 1.000 médicos que han sido contratados por el Servicio Andaluz de Salud (SAS), sus representantes no consideran que ésta sea "una garantía para el mentenimiento o seguridad de sus puestos de trabjo".

Las fuentes consultadas indicaron que desde 1978, año que vio la luz la última normativa legal referente a la forma de obtener el título de especialista (a través del MIR), "hubo y sigue habiendo un colectivo de médicos que no entra en una especialidad por el bajo número de plazas ofertadas".

Añadieron que, no obstante, "al no existir médicos suficientes con el título MIR, la Junta de Andalucía ha procedido a la contratación de los facultativos que han acreditado la formación médica que han ogrado por diversos cauces".