Larraz subrayó que en la prevención de la drogadicción es clave que la familia dé buen ejemplo y vigile el uso que hacen los hijos del tiempo de ocio.

De las 5.396 personas que siguieron los programas asistenciales de drogodependencias en 1999, 3.532 lo hicieron por su adicción al alcohol. "Uno de cada 10 jóvenes es un bebedor con problemas y al mens 2 son grandes bebedores", afirmó el consejero.

El consumo de heroína se mantiene estable en la comunidad autónoma, según la Memoria del Area de Drogodependencias de Sanidad, mientras que aumentan los consumidores de alcohol, cannabis, cocaína y drogas sintéticas. También crece el uso indebido de psicofármacos.

La cuarta parte de los jóvenes aragoneses reconoce haber tomado, al menos alguna vez, drogas distintas del tabaco y el alcohol. El 1 por ciento afirma consumirlas a menudo y el 0,5% habitalmente.