20-N. Rajoy termina la campaña con la promesa de "cambiar las cosas y resolver" el paro
- Llama a todos los españoles a votar al PP para cerrar "un paréntesis que ya se acabó" tras siete años de mandato socialista
- "Llego con seguridad, llego con equilibrio", dijo en un discurso más propio de una toma de posesión que de último mitin antes de las elecciones
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El líder del Partido Popular y candidato a la Presidencia del Gobierno, Mariano Rajoy, puso este viernes fin a la campaña electoral con la promesa de "cambiar las cosas y resolver" el problema del paro en España y realizó un último llamamiento a los españoles para que el 20-N acudan a votar masivamente con el fin de cerrar "un paréntesis que ya se acabó" tras siete años de mandato socialista en La Moncloa.
Rajoy lanzó este mensaje durante el mitin que ponía fin a la campaña de los populares, celebrado en el Palacio de Deportes de la Comunidad de Madrid ante más de 17.000 personas. Allí estuvo arropado por su mujer, Elvira Fernández, y toda la cúpula del PP, incluidos María Dolores de Cospedal, Soraya Sáenz de Santamaría, Esperanza Aguirre, Alberto Ruiz-Gallardón, José María Aznar, Pío García-Escudero y Jaime Mayor Oreja, entre muchos otros.
El discurso, más propio de un acto de toma de posesión que de final de campaña, dejó entrever que Rajoy se sabe ganador antes de la cita con las urnas y se siente a las puertas del Palacio de La Moncloa. "Estoy preparado para ser presidente de todos los españoles. Si quieren, estoy preparado para ser el presidente del Gobierno", sentenció a 36 horas de la apertura de los colegios electorales.
"Llego con seguridad, llego con equilibrio, no tengo intención ni ganas de presumir de absolutamente nada a estas alturas de mi vida. Llego con independencia, esa palabra que a algunos les molesta. Quien es independiente sólo rinde cuenta a los intereses generales y está probablemente para ayudar a esa gran mayoría que necesita ser ayudada. Sólo me va a mover el interés general de los españoles", dijo.
Esgrimió que afronta el reto "con la ilusión de poder cambiar las cosas, de resolver el mayor problema que hemos tenido en los últimos años, de devolver a los españoles la confianza en nosotros mismos y la prosperidad arruinada por malos años de gestión de malos gobernantes y de una irresponsabilidad manifiesta ante todos los españoles".
DECLARACIÓN DE PRINCIPIOS
Rajoy habló ante un público entregado. Le recibieron con cánticos de "¡Oa, oa, oa, Mariano a La Moncloa!" y no pararon de interrumpirle con gritos de ánimo y proclamas a favor de la unidad de España. El candidato replicó que constituye "un honor y una enorme responsabilidad". Aceptó el reto "con humildad". Garantizó la "cohesión social como garantía de fortaleza". Garantizó que dará "lo mejor de mí mismo por mi país". Subrayó que no se siente "peor que nadie pero tampoco mejor que ninguno". Y admitió que "probablemente" se ha equivocado "muchas veces" en los últimos años.
El líder del PP invitó a todos los españoles a sumarse a la renovación política que ofrece en la cita con las urnas de este domingo y argumentó que se hace urgente cambiar de políticas y de dirigentes porque "no ha habido un gobierno que haya estado a la altura" de las circunstancias durante estos años.
Advirtió de que España se encuentra en un momento "de extraordinaria trascendencia que exige una extraordinaria responsabilidad" y señaló a la fecha del 20 de noviembre y a la cita con las urnas como "el día de las ambiciones compartidas". Por eso, indicó que "es el momento para rescatar el valor de la responsabilidad democrática" y apostar en las urnas por "buenos gobernantes elegidos por los ciudadanos y que den la talla".
Frente al "voto del miedo" del PSOE, Rajoy apeló al "voto de la esperanza". Recordó que el PP ya encontró una situación económica muy delicada cuando gobernó por primera vez en 1996 y se mostró convencido de que ahora volverá a conseguir lo mismo pese a que la herencia recibida "va a ser un poco peor". Para lograr ese objetivo, prometió nombrar un gabinete de ministros de gente competente, capaz, que sepa de lo que habla y que no sea "un escaparate de figurantes". "Para lo fácil vale cualquiera, pero para lo difícil vale el PP con gente eficaz", remachó.
Rajoy adujo que, en plena crisis financiera internacional y con la prima de riesgo por las nubes, "es necesario que España recupere la confianza que tenía hace años cuando el PP estaba en el Gobierno". "Es necesario que se recupere el clima de la economía, es urgente que devolvamos a nuestro país la imagen que tenía de potencia creadora de empleo, de nación fuerte que era escuchada en el mundo y a la que nadie tenía que decirle lo que teníamos que hacer".
Como conclusión, llamó a los españoles a "escribir una nueva página en la historia de España". No obstante, advirtió de que "hará falta mucho esfuerzo para sacar a España adelante". "Sabemos que nada es gratis y sabemos que aquí no regala nada nadie, pero sabemos que si somos serios y nos esforzamos, sacaremos las cosas adelante".
Por su parte, la secretaria general del PP, María Dolore de Cospedal, criticó que el PSOE comenzó esta legislatura prometiendo el pleno empleo y ha terminado "susurrando en las gasolineras", tras el presunto caso de corrupción en el que aparece implicado el ministro de Fomento y portavoz del Gobierno, José Blanco.
De hecho, recordó que "hoy termina la campaña electoral y José Blanco no ha dimitido". También arremetió contra Zapatero, de quien dijo que "debería irse a mirar pasar las nubes", y contra el candidato del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, de quien comentó que debería marcharse para que le "den mimitos".
Por último, subrayó que el PSOE prometió el pleno empleo cuando empezó la legislatura y ahora ha pasado a decir "que no somos igual que Grecia", donde ha dimitido el primer ministro y se ha tenido que aceptar un plan de rescate de la Unión Europea.
(SERVIMEDIA)
18 Nov 2011
PAI/jrv