El miércoles pasado, el segundo jefe del Estado Mayor del Ejército de Tierra, teniente general Ignacio Martín-Villalaín, despidió a los componentes de la campaña en un acto celebrado en el Cuartel General del Ejército (Madrid). El jueves se presentó la campaña en la Universidad de Alcalá de Henares.

Allí, según informó Defensa, deseó suerte a los participantes a través del propio Canals, explicando que, dada la preparación que atesoran y que él comprobó "sorprendido y admirado" en su visita a la base "Gabriel de Castilla" hace dos años, fortuna "es lo único" que necesitan.

Ahora, continuó, "es importante que cada equipo siga haciendo mejoras en la base", y en este sentido subrayó la importancia de la convivencia: "Según cómo sea vuestra relación, eso será lo que transmitáis a los científicos que trabajen con vosotros", dijo a los militares.

Por su parte, el jefe de la División de Operaciones, general Fernando Alejandre, destacó que la crisis no ha supuesto "un menoscabo en la preparación y equipamiento de la campaña", y calificó la selección del personal de "rigurosa" y su formación de "magnífica". Por ello, instó a sus integrantes a "mantener el prestigio de esta misión" y les prometió seguir sus aventuras "con envidia".

El comandante Casals expresó su "profundo agradecimiento por la confianza depositada" en él y sus hombres y señaló como "objetivos prioritarios" la transmisión de imágenes y datos en tiempo real durante el invierno austral, el apoyo logístico en comunicaciones y seguridad de los científicos y las videoconferencias desde la base con instituciones académicas.