Pobreza

La pandemia lleva a 3,3 millones de españoles a sufrir privación material severa

Madrid
SERVIMEDIA

Un total de 3.291.180 de españoles sufren privación material severa, lo que provoca que no puedan sufragar todos aquellos gastos considerados esenciales, un guarismo que aumentó un 50% en el último año como consecuencia del impacto de la pandemia del coronavirus.

Así se pone de manifiesto en el undécimo informe ‘El Estado de la Pobreza. Seguimiento del indicador de pobreza y exclusión social en España 2008-2020’ de la Red Europea de Lucha contra la Pobreza (EAPN, por sus siglas en inglés), que fue presentado este jueves en el Senado en el marco de la conmemoración del Día Internacional para la Erradicación de la Pobreza, que se celebra el domingo.

En el acto estuvieron presentes el presidente de EAPN, Carlos Susías; el sociólogo y autor del informe, Juan Carlos Llano; y la responsable de Asuntos Europeos e Incidencia Política de la Red, Graciela Malgesini.

Los datos del informe ponen de manifiesto que la pandemia ha golpeado con mayor severidad a aquellos estratos de la población que ya se encontraban en una situación vulnerable. Prueba de ello es que la tasa de privación material severa subió un 50% en el último año -desde el 4,7% en 2019 hasta el 7% en 2020-, afectando a 3,3 millones de personas.

Cabe recordar que se considera que las personas están en privación material severa cuando no pueden permitirse cuatro de los siguientes elementos de consumo: comer carne, pollo o pescado al menos dos veces al día; mantener la vivienda con una temperatura adecuada; disponer de capacidad para afrontar gastos imprevistos; tener retrasos en el pago de gastos relacionados con la vivienda principal o en compras a plazos en los últimos 12 meses; ir de vacaciones al menos una semana al año; disponer de teléfono; contar con un televisor; mantener una lavadora; o disfrutar de un vehículo.

Este indicador aumentó en 15 de las 17 comunidades autónomas (únicamente Aragón y Castilla-La Mancha se mantuvieron incólumes) y para todos los grupos y segmentos de población analizados, como lo pone de manifiesto que actualmente sufren privación material severa casi uno de cada diez menores, una de cada cuatro personas provenientes de países extracomunitarios y uno de cada 20 españoles.

La privación material severa es una situación de vulnerabilidad que afecta prácticamente por igual a hombres (1.601.856) y a mujeres (1.689.351), habiéndose incrementado la tasa desde el 4,6% hasta el 6,9% en el caso de ellos; y desde el 4,8% hasta el 7% en el de ellas.

Ante esta situación, Juan Carlos Llano, atestiguó que, en términos de privación materia severa, “la Covid-19 ha tardado un año en conseguir lo que la crisis económica anterior tardó seis en alcanzar”.

El informe añade sobre este parámetro -privación material severa- que el 9,1% de los menores de 16 años la sufren, al igual que el 9,3% de quienes tienen entre 16 y 29 años; el 7,5% de las personas con edades comprendidas entre 30 y 44 años; el 6,7% de la población que tiene entre 45 y 64 años; y el 3,2% de los mayores de 65 años.

Del mismo modo, la privación material severa tiene un impacto desigual en las familias con menores a cargo que en aquellas sin hijos, como lo demuestra el hecho de que entre las primeras subió desde el 5,3% hasta el 8,2%, mientras que entre las segundas lo hizo desde el 4,1% hasta el 5,7%.

A su vez, el informe también indica que el 45,2% de la población española tiene dificultades para llegar a final de mes. A pesar de que la cifra es más baja que el año anterior (cuando se situaba en el 49,3%), las personas que llegan con mucha dificultad a final de mes aumentaron en un 28%, hasta los 4,73 millones de personas.

Por otro lado, el informe también se hace eco de los datos de pobreza y pobreza severa (guarismos sobre los que todavía se desconoce el impacto de la pandemia), habiéndose incrementado el primero desde el 20,7% al 21% y el segundo desde el 9,2% hasta el 9,5%.

Ahora bien, la pobreza severa es mayor entre los jóvenes (14,1%) que entre los adultos (8,6%), siendo el desglose por edades el siguiente: menores de 16 años (14,2%), entre 16 y 29 años (11%), entre 30 y 34 años (10,4%), entre 45 y 64 años (8,6%) y mayores de 65 años (5%).

La tasa de riesgo de pobreza y/o exclusión social (Arope) pasó del 25,3% hasta el 26,4% (12,4 millones de personas afectadas), mientras que la brecha de pobreza creció desde los 2.622 euros hasta los 2.828 euros.

Respecto de la desigualdad, la renta del 20% más rico de la población es 5,8 veces más elevada que la del 20% más pobre, convirtiendo a España en el sexto país con la tasa más alta de la UE, sólo superado por Bulgaria, Rumanía, Letonia, Lituania e Italia.

En ese sentido, Juan Carlos Llano, afirmó que “estar en una situación de pobreza es muy distinto de no estarlo”, como lo demuestra el hecho de que el 29,5% de la población que vive en pobreza extrema llega a final de mes con mucha dificultad frente al 8% que no está en la misma situación; que el 68,3% que vive en pobreza extrema no puede afrontar gastos imprevistos frente al 31,9% que no está en esa situación; que el 15,5% que vive en pobreza extrema no puede comer carne, pollo o pescado cada dos días frente al 4,3% del resto de la población; que el 31,8% que vive en pobreza extrema no puede comprar ropa nueva frente al 9,3% del resto de la población; o que el 8,5% que vive en pobreza extrema no tiene dos pares de zapatos frente al 2,1% del resto de la población.

A pesar de ello, Carlos Susías comentó que el escudo social aprobado por el Gobierno “ha parado el golpe”, ya que, de lo contrario, se estaría ante una “situación de catástrofe social”.

Por último, Juan Carlos Llano aseveró que “España está lejos de cumplir” las metas establecidas por los Objeticos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Agenda 2030 y el Pilar Europeo de Derechos Sociales, por lo consideró “necesario” llevar a cabo un “esfuerzo suplementario” para reducir esas tasas, máxime en un contexto de crisis como el actual.

(SERVIMEDIA)
14 Oct 2021
MST/gja