Narcotráfico

Intervenida en Cuenca cerca de una tonelada de marihuana a dos bandas de traficantes

MADRID
SERVIMEDIA

La Guardia Civil ha intervenido en Cuenca cerca de una tonelada de marihuana a dos organizaciones criminales que cultivaban esta droga en el interior de sus viviendas y en propiedades deshabitadas.

Según informó este jueves el Instituto Armado, en el marco de la 'operación Multilocus' han sido detenidas 13 personas e investigado otras tres. Todos ellos tenían edades comprendidas entre los 20 y los 67 años de edad.

Los arrestados actuaban en localidades conquenses de Casas de los Pinos, Vara del Rey, El Provencio, Casas de Fernando Alonso y Casas de los Pinos. En estos municipios los investigados cultivaban la droga en el interior de viviendas o en lugares deshabitados.

En los registros ha sido intervenida cerca de una tonelada en bruto de 'cannabis sativa' (850 kilogramos aproximadamente), de las que obtenían cogollos, inflorescencias, marihuana seca y envasada. También se han localizado 32 paquetes de semillas con modificación genética para optimizar cultivos (plantas feminizadas).

CULTIVADORES ASOCIADOS

La operación se inició en julio del pasado año, cuando los agentes pudieron comprobar la existencia en la provincia de Cuenca de dos grupos dedicados al cultivo de cannabis sativa, que, tras su cosecha y secado, era puesta a la venta hacia terceros.

Ambos grupos estaban perfectamente estructurados y jerarquizados y usaban sus propias viviendas, así como propiedades deshabitadas para el sembrado de cannabis. En algunas ocasiones, utilizaban a terceras personas para que, a cambio de una cantidad de dinero, sembraran en sus propiedades la droga, para lo cual se les facilitaban las semillas, así como fertilizantes y materiales para favorecer el crecimiento de las plantas.

Una vez cosechadas, llevaban el producto a los lugares de secado que el grupo tenía para ello. Para favorecer el apoyo de estos 'cultivadores' les hacían creer que como eran pocas las plantas cultivadas, la Guardia Civil nunca iba a entrar en sus propiedades para incautar los cultivos.

Posteriormente, cuando eran recolectadas las sustancias estupefacientes las transportaban a una 'guardería', donde se almacenaban y secaban los cogollos. Una vez listos, eran envasadas al vacío para su posterior venta. Todo este entramado permitía diversificar las zonas de cultivo y dificultar la detección de las plantaciones por parte de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad.

(SERVIMEDIA)
14 Oct 2021
NBC/gja